El delantero argentino, Lucas Boyé, no jugará frente el Barcelona, ya que sigue arrastrando molestias en los gemelos
El Granada ve cada vez más lejana la salvación en cuanto a puntaje de los rivales. Con Cádiz, Mallorca y Sevilla a ocho puntos, la permanencia empieza a ser una utopía, aunque resten 15 jornadas. A la complicada situación clasificatoria, se suma la falta de efectividad arriba y la ausencia, desde el pasado encuentro, del delantero referencia del Granada, Lucas Boyé.
´Cacique` Medina aclaró en la rueda de prensa posterior al encuentro contra la UD Las Palmas que el delantero aquejaba dolor en uno de sus gemelos. Por lo que no se sabía como sería la evolución del jugador. Con el partido frente al FC Barcelona en Montjuic a cuatro días vista, parece que Lucas Boyé no jugará por tercer partido seguido. Tras cumplir sanción por quinta amarilla contra el Getafe, y la lesión que le impidió jugar frente a la UD Las Palmas.
Sin Boyé, el Granada tiene la opción de alinear a Matías Arezo, como en los dos últimos partidos, o incluso a Uzuni como único punta. Como ya jugó la pasada campaña en segunda. Lo que se pregunta el granadinismo es por qué razón el Granada no fichó un delantero centro, un nueve, en el mercado invernal (ya que era uno de los objetivos de la dirección deportiva). Las marchas de Famara al Cardiff y Weissman a la Salernitana dejan solo al uruguayo como único delantero para sustituir al argentino. Y por el momento sus actuaciones han sido bastante discretas como titular.
Más bajas
A la baja de Lucas Boyé, se sumarán la de Kamil Piatkowski, expulsado frente a la UD Las Palmas el pasado sábado cumplirá sanción frente al Barcelona, y Gonzalo Villar, que cumple ciclo de amonestaciones al ver su quinta amarilla el fin de semana. Veremos como recompone el equipo Alexander Medina ante estas tres sensibles bajas.
