La defensa del Real Madrid vuelve a recordar las pesadillas del año pasado y se queda a cuadros tras apenas un mes de competición
Una vez más, el Real Madrid comienza la temporada con muchos problemas físicos en su plantilla. Las lesiones han vuelto a agitar los esquemas de Ancelotti, hasta tal punto de no contar con apenas centrales. A día de hoy, tan solo Rüdiger está sano, atrayendo aún más problemas al técnico italiano. Este traspié, junto con el agridulce inicio liguero del conjunto blanco, hace del comienzo de temporada un suplicio.
La misma historia que el año pasado
El Real Madrid ha vuelto a quedarse corto en cuanto a fichajes se refiere. Tan solo dos fichajes en todo el mercado veraniego, Mbappé y Endrick. Dos fichajes en la delantera blanca. Sin embargo, la defensa del equipo se ha vuelto a quedar sin completar, al igual que pasó el año pasado tras la lesión de Militão. Una posición que ha traído dolores de cabeza en los últimos años al Real Madrid.
Tras el no fichaje de Leny Yoro, y las salidas del capitán, Nacho Fernández, o jugadores como Rafa Marín, el Real Madrid no ha querido incorporar nuevas caras. Y es que, Vallejo, Alaba y Militão están lesionados. Además, Mendy y Tchouaméni (jugadores que podrían ejercer de central) también están fuera de combate, además de los dos centrales del filial, Joan Martínez y Jacobo Ramón. Esto deja a Ancelotti con un rompecabezas tras un mes de competición.
¿Y ahora qué?
Con solo Rüdiger disponible en la zaga central, el entrenador blanco tendrá que recurrir a un jugador fuera de posición. Carvajal toma papeletas a jugar como central, siendo uno de los «más experimentados» en dicha posición. A apenas una semana del comienzo de la Champions League y con la Real Sociedad a la vuelta de la esquina, todo hace pensar que el Real Madrid tendrá que salvar los muebles en defensa como pueda.
