Tras los pocos minutos con la camiseta azulgrana, Vitor Roque y el Barça se plantean una cesión en la que el delantero pueda explotar en Europa
Hace cuatro meses llegaba a Barcelona el delantero brasileño Vitor Roque. Un nuevo fichaje que llegaba para hacer competencia a un Robert Lewandowski que no mostraba un buen nivel por aquel entonces. Sin embargo, la película ha cambiado. Al polaco se le caen los goles y Roque no ha logrado encontrar la estabilidad necesaria para ganarse un hueco en el Barça.
Tal y como informó Mundo Deportivo, el FC Barcelona estaría planteándose la cesión del ariete si este verano no pueden incluirle por el tema del ‘fair play’ financiero. Xavi, en numerosas ocasiones, ya ha hablado de su situación: “No es fácil venir de otra liga con la edad que tiene. Necesita confianza y jugar y ya decidiremos. El puede jugar en el Barça en el futuro seguro porque tiene calidad».
Quiere hacerse un hueco
En la cabeza de Vitor Roque sólo entra el suceso de hacerse un sitio entre la gran competencia que tiene el Barça en la zona de ataque. Después de no haber jugado ni un solo minuto en la Champions ni en el Clásico, la participación de ‘Tigrinho’ en la competición doméstica se resume en dos titularidades y un total de 276 minutos en 11 encuentros. En todo este tiempo, el delantero brasileño ha logrado ver portería con éxito en dos ocasiones.
Ahora, con el Barça intentando asegurar el segundo puesto, Vitor Roque espera tener una mayor aportación en cuanto a minutos de juego se refiere, para así demostrar sus cualidades y poder tener un hueco el próximo curso.
En el caso de no tener esa continuidad, el Barça, como es obvio, se planteará su cesión a otro club europeo de un perfil más bajo para que allí, Roque pueda tener más minutos de los que ostenta en la Ciudad Condal.
Las inscripciones: un lío para este verano
Informa Mundo Deportivo que en caso de que el Barça decida que tiene que salir cedido porque no puede inscribirlo en LaLiga puede haber lío. Y es que en ese caso, técnicamente, Vitor Roque se consideraría un jugador libre y, por tanto, podría fichar por cualquier otro club. Obviamente, ni el jugador ni su entorno desean verse en esa tesitura, pero legalmente es una situación que puede darse. De hecho, muchos de los contratos de los fichajes de la temporada pasada, como el de Gündogan o Iñigo Martínez, por poner algunos ejemplos, ya contemplaban que los futbolistas quedarían libres si el Barça no podía inscribirlos.
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