Tras el primer partido de la temporada en la Supercopa, ambos conjuntos se vuelven a ver las caras en la tercera jornada de liga
Un clásico siempre es un partido importante. Ambos equipos tienen la obligación de ganar a su máximo rival por muy pronto que sea en la temporada. El FC Barcelona llegaba al clásico tras salvar una victoria en el último segundo ante el Zunder Palencia, 83-84 y con sed de vengaza por lo sucedido en la Supercopa. Por su parte, el Madrid también sufría ante el Baxi Manresa para lograr seguir invictos. Con un escenario increíble, como el Wizink Center, todo estaba preparado para disfrutar de un espectáculo de este calibre en la liga Endesa.
1Q: 14-13
El Real Madrid saltaba a la cancha con Campazzo, Abalde, Musa, Yabusele y Diagne mientras que el Barcelona iniciaba el partido con Satoransky, Laprovittola, Kálinic, Parker y Vesely . La primera canasta del partido era blana, Diagne cogia un rebote de Yabusele para iniciar el clásico. Un triple de Campazzo y una canasta de Musa tras robo daba al conjunto local una temprana ventaja de cinco puntos. Los primeros instantes del partido empezaron con un Madrid mucho mejor en la parte defensiva, cerrando las opciones del Barça, que le estaba permitiendo correr y encontrar situaciones favorables.
Jabari Parker estaba sosteniendo en el partido a su equipo en ambos lados de la cancha. A pesar de los esfuerzos del norteamericano, el equipo blanco conseguía una ventaja de 8 puntos a mitad de cuarto. Las rotaciones entraban en juego peor el partido seguía con la misma tónica. Un Real Madrid cargando mucho el rebote en ambas zonas y una defensa intensa que no permitiía al rival anotar. Un triple de abrines liberado recortaba distancias tras numeros fallos del ataque local, un parcial de 2-9 a favor de los catalanes para finalizar los primeros 10 minutos.
Los segundos 10 minutos empezaban de la mejor manera para `los vikingos´ con un alley-oop del Chacho para Poirier. La fórmula del alley-oop parecía funcionar en el ataque blanco se reptía la conexión española-francesa. El Barça no se dejaba amedrentrar por la espectacularidad de su rival y con dos canastas fáciles se colocaba por delante en el marcador, por primera vez. Tercer alley-oop en menos de 3 minutos de cuarto para no dejar al Barça marcharse en el marcador. Un cuarto más anotador que el anterior con los mismos puntos anotados en la mitad de tiempo.
El marcador se volvía loco en cada posesión cambiaba el resultado. Un tapón increíble de Ndiaye a Jokubaitis evitaba que el Barça lograra su mayor ventaja en el partido. Un triple local les devolvía la ventaja en el marcador a falta de minuto y medio. Hasta el momento, estaba siendo un partido muy físico y dónde los árbitros habían puesto un listón alto en las faltas, siendo permisivos en muchas ocasiones. Roger Grimau tuvo que pedir tiempo muerto tras el `miniparcial´ de cuatro puntos del Real Madrid.
Primer Tiempo: 37-33
3Q: 59-50
La primera canasta del segundo tiempo era de Kalinic. Mucho desacierto y fallos por parte de ambos conjuntos en las primeras posesiones. Solo una cansta para cada equipo. Falta técnica a Campazzo por parar un contrataaque azulgrana. El Madrid seguía mandando en el marcador con siete puntos de diferencia. El partido seguía con un nivel físico muy alto con los jugadores muy agresivos en ambos lados del parquet. La tensión crecía por momentos. Poirier, con una bandeja a tablero, rompía la brecha de los 10 puntos.
El Barça seguía sin encontrar su juego y sin crear opciones buenas. El Real Madridmantenía la renta obtenida con relativa facilidad. El Madrid volvía a defender como al principio del partido dejando con sólo 11 puntos a su rival a falta de dos minutos. El clásico se iba al último cuarto con todo por decidir pero con una ventaja de 9 puntos para los blancos.
Arrancaban los últimos 10 minutos del primer clásico de la liga regular. Con una bandeja de otro mundo de Llull y un triple de Jokubaitis. El Madrid quería sentenciar el partido y dejar sin opciones a su máximo rival mientras que el Barça quería mantenerse con vida en el encuentro, gracias a individualidades. Chus Mateo se llevaba una falta técnica por protestar. Gracias a eso y otra canasta, el Barça reducía a 6 la distancia. El entrenador local pedía tiempo muerto para frenar el parcial blaugrana.
El tiempo muerto resultaba bien y se volvía a la distancia de 10 puntos. Un dato de la gran defensa blanca, 11 recuperaciones por las 6 del Barça. A falta de 5 minutos para el final, el Real Madrid continuaba con una ventaja de 8 puntos en el marcador. La distancia máxima en el luminoso ha sido de 12 puntos. Un triple de Campazzo, 15 puntos en total, y una canasta de Musa, dejaba casi sin opciones al Barça. Satoransky, tras un mate espectacular sobre Poirier, se llevaba una técnica y se iba del pabellón por chillarle al francés tras esa acción.
Poirier se tomaba su venganza con un mate espectcular para poner el +16 en el marcador y sentenciar el partido a falta de dos minutos. El FC Barcelona intentaba recortar distancias y poder meterse en el partido pero ya era demasiado tarde.
Final del tiempo reglamentario: 86-77
MVP:Vicent Poirier (22 puntos, 8 rebotes y 2 asistencias)