El Atlético de Madrid debuta esta tarde en la competición copera en busca de levantar el título once años después
En una de las mayores crisis que se recuerdan en la etapa de Diego Pablo Simeone, llega el Atlético de Madrid a Vic para debutar en la Copa del Rey 2024. Se dice que la Copa es el titulo más fácil que puede pelear el Atlético de Madrid. Cinco, seis o siete partidos y te plantas en la final de Sevilla. Este año sin haber empezado la competición ya se puede decir que la Copa será el único título que los rojiblancos puedan competir esta temporada. Sin haber acabado octubre, el Atleti está a diez puntos del líder en Liga, y hoy por hoy, fuera de los 24 primeros en Champions.
La afición siempre se ilusiona por esta competición. El año pasado, las buenas actuaciones en casa hicieron que el Atlético acariciase con sus manos la final en la Cartuja. Primero fue en Lugo, donde tras una mala primera parte, Simeone agitó el banquillo para no irse a las primeras de cambio. Luego llegó el derbi. Un ejercicio de contundencia hizo que el partido se fuese a la prórroga, prórroga en la que el Madrid murió en la orilla tras el cansancio de la Supercopa de España. El Sevilla en cuartos fue la tercera víctima de los colchoneros. Un 1-0 ramplón valió para clasificarse entre los cuatro mejores de la competición. El sorteo deparaba un bonito enfrentamiento entre Athletic y Atlético. La vuelta en San Mamés sería el escollo que tendrían que superar los madrileños para llegar a tan ansiada final. La poca puntería en la ida y el repaso de los leones en la vuelta dejaron al Atlético sin final.
La copa no se tira
Esto debió pensar Simeone al darse cuenta que era la opción más sencilla para tocar plata. Tras la consecución del titulo en el Bernabéu, el Atlético de Madrid solo ha alcanzado dos veces las semifinales. En 2017 frente al F.C. Barcelona, y la pasada temporada frente al Athletic Club. La Copa parecía que no importaba cuando el equipo se mudó a San Blas. En la primera temporada tras la mudanza, el Sevilla vapuleó en el Metropolitano al Atleti con una cantada estrepitosa de Moyá. Después de esta temporada llegaron los años de plomo. Girona, Cultural y Deportiva Leonesa y para dar la puntilla, el Cornellá, un equipo de 3ª división. A partir de ahí, el equipo cayó siempre contra equipos importantes o contra el campeón, como fue el caso del Athletic y el Real Madrid.
BARCELONA, ESPAÑA – 06 DE ENERO: Ángel Correa, del Atlético de Madrid, se retira desanimado tras la derrota en el partido de la Copa del Rey entre el Cornellà y el Atlético de Madrid en el Camp Municipal de Cornellà el 6 de enero de 2021 en Barcelona, España. (Foto de Eric Alonso/Getty Images)
La victoria más necesaria en estos tiempos de crisis
El «cholismo» está sufriendo una de sus mayores crisis de identidad desde que el entrenador argentino llegase a Madrid en diciembre de 2011. La imagen del pasado domingo en el Villamarín denota un equipo que no muerde, no presiona, no hace faltas y no sabe a lo que juega. Los jugadores que tendrían que tirar del carro no lo hacen y bajas como la de Le Normand, Llorente o Barrios acentúan aun mas la crisis del equipo. Esta tarde en Vic es clave ganar para poco a poco ir recuperando la confianza y no perder la poca identidad que le queda al equipo.
