El búlgaro admite “haber vivido momentos de ansiedad y ataques de pánico en pista” y llegado a plantearse colgar la raqueta hasta en tres ocasiones
La cabeza lo es todo. No importa en qué ámbito de la vida, sin una estabilidad mental resulta imposible llevar a cabo cualquier proyecto de manera adecuada. En el deporte, por su idiosincrasia, se multiplica. Los jugadores no solo se exponen ellos mismos a las críticas, a la presión o al foco mediático, sino que su futuro y, quizás el de su familia, también esté en juego. Sino ganas, no recibirás premios económicos, no llamarás la atención de patrocinadores…y eso puede hacer que un deportista se planteé dejarlo como en el caso de Grigor Dimitrov.
Cada vez son más los tenistas que deciden abrirse y hacer públicos sus problemas de salud mental. Badosa, Osaka o, más recientemente, Rybakina. La ucraniana se encuentra en un periodo de stand by, recuperándose para regresar a las pistas. Quizás en el circuito masculino no es tan común, se tiende a esconder más las debilidades. Sin embargo, el propio Alcaraz confesó tras el US Open “no estar bien mentalmente”. Y, ahora, Dimitrov es el que ha dado un paso al frente.
Una caída muy dura
Dimitrov llegó a ser el número 3 del mundo, apodado como `BabyFed´ por su revés a una mano y similitud al suizo. Sin embargo, tras rozar el trono internacional, cayó de forma estrepitosa hasta casi salir del top 100. Las lesiones, su juego y evolución no fue como se esperaba. Y le pasó factura a nivel mental. Tuvo que cuidar su salud mental con mimo para no terminar dejando el deporte, pues sí que se le pasó por la cabeza hacerlo. “Te mentiría si dijera que nunca he tenido ese pensamiento (dejar el tenis)”, confesó en rueda de prensa del ATP de Estocolmo y así recoge Punto de Break.
«He vivido momentos de ansiedad grave, de ataques de pánico, incluso durante un partido de tenis. Siempre ayuda cuando puedes hablar con alguien, compartirlo, incluso si es con otro tenista. Todos deberíamos abrirnos más entre nosotros. Sé que es complicado, que es un deporte individual y que es brutal, pero al final, todos somos humanos, no somos diferentes a nadie, simplemente jugamos bien al tenis, eso es todo”, prosiguió.
Dimitrov en el Masters 1000 de Shanghái 2024. Photo by Zhe Ji/Getty Images
“He pasado por muchas cosas en los momentos más grandes de mi vida. Si te contara esas cosas, pensarías: ‘¿Y sigues jugando?’. Cada uno tiene su camino. Tienes que escucharte a ti mismo, lo que necesitas. El tenis es muy importante, pero después de estos años de experiencia no solamente en pista, también fuera de ella, empiezas a darte cuenta de la importancia. Todos queremos aparentar ciertas cosas, pero lo importante está dentro. Trabajo en ello, pero me sigue costando mucho”, agregó el búlgaro.
A punto de retirarse tres veces
“Incluso por todo lo que he vivido en mi carrera fuera de pista, las malas experiencias, cuando sentía que el mundo entero estaba a punto de desmoronarse ante mí a partidos que he perdido y en los que me preguntaba cómo podía haberme pasado eso… todas esas cosas son inevitables, suceden, pero lo importante es cómo lo gestionas. Cuando en 2019 llegué al US Open como número 82 del mundo, ese año empecé en el tercer puesto. He estado a punto de retirarme del tenis tres veces«, comentó Dimitrov sobre su salud mental.
“Creo que muchos deportistas de todo el mundo están poco a poco expresándose algo más, algo que es fantástico ver. Especialmente, he visto a varios jugadores de la NBA hablar abiertamente de la salud mental. No hablamos lo suficiente de ello. Aunque entiendo perfectamente que nosotros, los hombres, no solemos charlar de estos temas, pero pienso que deberíamos, no es ninguna debilidad, es todo lo contrario. Mostrarte vulnerable es una gran fortaleza”, zanjó.
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