A pesar de la llegada del astro francés, el Real Madrid no ha desplegado su mejor fútbol en este inicio de temporada, y la explicación podría ser la ausencia de Toni Kroos
El Real Madrid ha arrancado LaLiga 24/25 con muchas dudas y un estilo de juego que no termina de convencer. En la victoria ante el Atalanta en la Supercopa de Europa se pudo ver un Real Madrid con mucho potencial, que ganó cómodamente al campeón de la Europa League. Sin embargo, en las dos primeras jornadas de liga el conjunto blanco ha mostrado una versión mucho más pobre.
En el debut liguero ante el Mallorca los de Ancelotti fueron incapaces de pasar del empate. El Madrid se adelantó en el 13′ con un gran gol de Rodrygo, pero el conjunto bermellón devolvió las tablas al marcador cortesía de Muriqi. A partir del tanto del Mallorca, el actual campeón de Europa se atascó por completo. Apenas generó peligro a los locales, que estaban bien plantados en un bloque bajo.
Misma historia durante la primera parte del Real Madrid-Valladolid. Los ‘nuevos galácticos’ se marcharon al descanso con un registro de goles esperados ridículo: 0,09. Tan solo un disparo de Mbappé en el primer tiempo que atrapó fácilmente Hein. No sabemos que hubiera pasado si Valverde no hubiera abierto la lata con aquel zapatazo, pero lo que está claro es que el partido se estaba poniendo cuesta arriba para los de ‘Carletto’.
Falta rodaje… y algo más
El mal arranque del Real Madrid podía ser algo previsible, ya que el equipo ha experimentado cambios en este mercado de verano. Con la llegada de Mbappé el rol de Vinícius, Rodrygo y Bellingham se ve modificado, y lo lógico es que las piezas tarden un tiempo en encajar. Sin embargo, hay otro factor que puede haber alterado aún más el ecosistema del Madrid: el adiós de Toni Kroos.
La temporada pasada fue una de las mejores de la carrera del alemán, llegando incluso a entrar en la conversación del Balón de Oro. Su papel en el conjunto de Ancelotti fue fundamental, dirigiendo el juego del equipo y aportando orden cuando escaseaba. Su retirada supuso una pérdida enorme para el mundo del fútbol, pero en especial para el Real Madrid.
Y es que no hay un jugador como Kroos en la plantilla actual del Real Madrid. Modric prolongó su marcha un año más, pero desde luego que no es el sustituto natural del ‘8’. Tampoco lo son Valverde, Bellingham, Tchouaméni o Camavinga, jugadores con un talento descomunal, pero que carecen de ciertas virtudes que hacían especial a Kroos. Su visión de juego, su capacidad para ordenar al equipo, su facilidad para desajustar la defensa rival con un pase…
Es indudable que el Real Madrid tiene una de las mejores plantillas del mundo, y seguirá ganado títulos sin Kroos. Pero la pérdida del alemán es un problema que el conjunto blanco deberá solventar, y la respuesta no parece ser buscarle sustituto, sino adaptar el juego a las características de la plantilla actual.
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