AFICIÓN DEPORTIVA FÚTBOL ESPAÑOL,LALIGA HYPERMOTION Ni fue el primero… ni será el último

Ni fue el primero… ni será el último


El del pasado sábado no fue más que el enésimo error arbitral en contra del CD Eldense en una temporada en la que el VAR le está quitando mucho más de lo que le está dando

La relación entre la sala VOR y el Deportivo no atraviesa su mejor momento. Pasan los días, pero el rebote en el seno de la afición eldense no cesa. Y es que, el pasado sábado en el Estadio José Zorrilla, los 200 aficionados que tiñeron las gradas pucelanas de azulgrana quedaron atónitos ante un nuevo bochorno encabezado, en esta ocasión, por el navarro Iosu Galech Apezteguía. Tras el gol de Timor a pase de Marc Mateu y su correspondiente celebración, el colegiado se llevaba la mano al pinganillo. Tras varios minutos de revisión, Gorostegui Fernández, encargado principal del VAR, pidió al árbitro de campo que revisara la jugada.

Una jugada que no es gris ni mucho menos. Es blanca como la leche. Pese a que el gol quedara anulado por fuera de juego posicional de Iván Chapela, hay algo en lo que absolutamente todos los medios a nivel nacional están de acuerdo, la decisión era un despropósito. Un despropósito que, lejos de olvidarse con el paso de las horas, no hizo otra cosa que resultar todavía más grave, si eso es posible, tras la publicación de la conversación entre el árbitro y la sala VOR. Más allá de permitir que el colegiado realizara una valoración objetiva de lo sucedido con la ayuda de la pantalla, Gorostegui Fernández no ayudó en la decisión desde el VAR con sus comentarios. «Vas a ver la cercanía (de Chapela) respecto al portero, como el balón pasa por su zona, que entra por el centro de la portería y que ese último gesto, desde mi punto de vista, impacta en el portero».

«Según el punto de vista de Gorostegui Fernández». Resulta que el VAR, aquel que venía a ayudar al fútbol tendiendo la mano en jugadas únicamente claras y manifiestas, ahora también se encarga de emitir su opinión. Sin embargo, si esta fuera la primera vez que el VAR le ha birlado puntos al Deportivo esta temporada, la cosa no hubiera pasado a mayores. No es el caso, ya que en el partido de ida frente al Valladolid, se anuló un gol legal de Juanto Ortuño por falta al portero. Una falta en la que ninguna de las 20 cámaras que habitúan en el Nuevo Pepico Amat pudieron demostrar el contacto entre Juanto y el meta en el remate.

La duda en la afición deportivista es clara. En caso de haber sido Monchu el del ‘golazo’ por la escuadra y Marcos André el del «fuera de juego posicional», ¿habría Galech Apezteguía sido llamado a revisar la jugada con la presión de 18.000 vallisoletanos en las gradas? Jamás lo sabremos.

¡COMPÁRTELO EN TUS REDES!

Related Post