Pese a que los resultados del resto de la jornada no han acompañado, el Levante venció al Real Zaragoza en casa y vuelve a creer en meterse en play off
Si vengo a verte, será porque te amo
La sintonía Sarà perche ti amo ha calado en el Ciutat de Valencia. Y no solo por su ritmo, sino por su mensaje. Hasta hace poco, era terrible ver como al Levante se le hacían bola los partidos en el feudo granota.
Y si bien le sigue costando, últimamente ha cosechado los resultados esperados. Con mucho sufrimiento, algo que caracteriza a la mayoría de encuentros del Levante, pero logrando el objetivo que en muchas ocasiones no se alcanzaba.
Un factor clave en esto ha sido la afición. Una hinchada que ha estado en las buenas, en las duras y en las maduras. Desde hace dos años han primado estas últimas, pero parece que al fin se está obteniendo algo que se había perdido, y no puntos: la conexión equipo-grada.
Los malos resultados no significan necesariamente que haya que dejar de animar. El desapego y pérdida de identidad, sí. Porque esta temporada el Levante lo único que transmitía sobre el verde era precisamente eso, desapego y apatía. Pero ahora, estos últimos partidos han sido vitales para volver a enganchar a un público que comenzaba a ver el futuro muy negro. Pero un público que, ahora sí, puede decir que «si vengo a verte, será porque te amo».
Unos resultados fruto DELA pasión
El equipo ha dado señales de estar vivo. Muy vivo además. Y esto se debe al coraje y la pasión empeñada en las últimas jornadas, que han devuelto la ilusión al club y la afición.
Gran parte de los jugadores están rindiendo, pero uno se erige sobre los demás. Y ese es Adrián de la Fuente o simplemente Dela. El ex central del Villarreal B se ha convertido en líder absoluto de la defensa y del equipo en general.
Más allá de su poderío para controlar la zaga granota, ha sacado a pasear su capacidad ofensiva, ya que desde el mes de febrero suma cuatro goles y una asistencia. En el encuentro frente al Real Zaragoza dejaría asombrados a todos los presentes, incluso a sí mismo, con un golazo sensacional que sirvió para quedarse con los tres puntos.
Un calendario que invita a soñar
Ocho jornadas para saber si asciendes o te mantienes en el infierno. Ocho partidos para evitar cometer los errores del año pasado. El calendario para el Levante se puede llegar a considerar asequible, pero ni mucho menos sencillo.
Serán cuatro partidos en casa donde la afición tiene que entregar el máximo y jugar su papel de jugador 12 para ganar. Y cuatro partidos como visitante donde podrían darse desplazamientos de la hinchada en busca de llevarse los puntos a la capital del Turia.
Por delante, visitarán el Ciutat de Valencia los siguientes equipos: Amorebieta, Cartagena, Eibar y Alcorcón. Por su parte, el Levante viajará a Santander (contra el Racing), Vila-Real (contra el Villarreal B), Elda (contra el Eldense), y un último envite contra el Huesca. La suerte está echada.
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