El Obradoiro cayó ante un San Pablo Burgos muy superior en todos los ámbitos del juego que demostró el porqué de su liderato
La evolución es evidente, pero, al menos de momento, no es suficiente. El Obradoiro, salvo cinco minutos espectaculares en el tercer cuarto, no incomodó al líder. El fondo de armario, la calidad individual, el planteamiento y, sobre todo, la defensa determinaron el enfrentamiento desde los primeros compases. Tan solo una reacción de los de Félix Alonso tras veinticinco minutos de sometimiento por parte del Burgos impidió la paliza e, incluso, abrió una pequeña posibilidad de remontada. Sin embargo, el tirano de la categoría demostró que, para ser prácticamente invencible, no basta con una mitad decente.
Se rompió, de dicha forma, la racha positiva del Obradoiro en la competición doméstica. Davison y Brodzianky, dos de los grandes nombres de las últimas semanas, sufrieron en unos sistemas defensivos específicos que les dejaron fueran de combate durante el primer tiempo. Faltó apoyo de los Millán, Rati, Galán y compañía…pero el principal problema estuvo en el apartado defensivo. En ningún momento consiguieron los de Félix Alonso detener el flujo ofensivo de un Burgos que promedia 90 puntos y terminó con cinco jugadores por encima de la decena. Golpe de realidad que indica que, aunque la evolución y mejora sea notoria, aun no se cuentan con los mimbres para pelear con el líder.
El líder aplasta
Tres semanas más tarde de su última cita, en el mismo escenario y diferente competición, aterrizó el Obradoiro con las bajas de Álvaro Muños y Oliver Stevic. Y, con esas dos ausencias, repitió Félix el mismo quinteto inicial que ante Cartagena: Quintela, Davison, Millán Jiménez, Galán y Balvin. San Pablo Burgos venía de sufrir lo indecible para doblegar a Palencia y, ante un rival de entidad como el Obradoiro, llegaba con la lección aprendida. El plan de partido de Bruno Savignani, sobre todo en lo defensivo, fluyó a las mil maravillas. Cremo en el inicio y Almazán posteriormente negaban los manos a manos de Balvin con Davison o Quintela, empantanando por completo la ofensiva gallega.
También tenían preparado un plan específico para Brodziansky, colocándose en zona 2-3 cuando este recibía el balón, acudiendo a las ayudas y neutralizándolo por completo. Eso, sumado a un acierto exuberante, provocó que los de Félix Alonso fueran a remolque constantemente. Apenas habían transcurrido cuatro minutos cuando el técnico leonés paró el encuentro (11-5). No solo era en la ofensivo, sino que en lo defensivo Burgos entraba a la pintura santiaguesa con mucha facilidad. Y no se trataba de un jugador en concreto, sino de un acierto coral por parte de los burgaleses que demostraban los motivos por los que van líderes desmarcados de la categoría.

Fuente: Redes Sociales `X´ del Obradoiro
Al buen inicio de Cremo, con cinco puntos consecutivos, lo secundaron Corbalán, Stumbris, Cuevas…todos aportaban. La dinámica no cambió en un primer cuarto en el que Balvin impidió la hecatombe (29-18), aunque a sus compañeros les costase horrores encontrarle tras el pick and roll. Culpa de ello tenían también Fischer y Goloman, regresando rápidamente a sus posiciones gracias a la velocidad de las ayudas. San Pablo Burgos era un reloj suizo al que ninguna pieza si quiera amenazaba con retardarse.
Más de lo mismo
Apostó Obradoiro por un quinteto de mucha altura, con Micovic jugando de alero en el segundo cuarto. Nada parecía suficiente. Sí, tenían minutos positivos en los que frenaban de forma puntual el torrente castellano, pero eran efímeros. Tocaron fondo cuando, tras un triple de Cuevas, Félix detuvo de nuevo el cronómetro. En quince minutos Burgos sometía al Obradoiro por dieseis puntos de diferencia (41-26). Cierto es que se estaban encontrando los líderes con tiros liberados, que defensivamente el conjunto gallego estaba perdido, pero el acierto local rozaba la perfección. 6/7 desde el perímetro y 8/10 en tiros de dos, números con los que es imposible ir perdiendo.
Una realidad que contrastaba con la de los visitantes, pues tan solo contaban con un triple en siete intentos. Nacho Varela, después del tiempo muerto, se fijó cambiar esa estadística y, con dos consecutivos, otorgó un haz de luz en la ilusión obradoirista. Llegaron a colocarse a nueve (45-36), hasta que ellos mismos volvieron a cavarse su propia tumba. Dos pérdidas consecutivas propiciaron un parcial de 5-0 a favor del Burgos que encaraba el camino a vestuarios con una seguridad pasmosa (49-36). El reto del Obradoiro, si ya parecía complicado en la previa, requería de tintes épicos tras los primeros veinte minutos.
Reacciona Obradoiro
Querer y no poder era la sensación que transmitía el Obradoiro. También pequeñas desconexiones que le costaban muy caro. De tener un tiro libre para ponerse a doce (53-40) a permitir dos transiciones rápidas del Burgos que empinaban todavía más la cuesta (57-40). Félix Alonso, completamente desesperado, solicitaba tiempo muerto cuando si quiere habían transcurrido tres minutos de tercer cuarto. Un quebradero que se contagiaba a los jugadores, siendo Sergi Quintela, que cometía una falta de ataque fruto de las ansias, la mayor evidencia de ello. Burgos se divertía, muy por encima también en el aspecto físico, con Corbalán y Fischer machando el aro.

Fuente: Redes Sociales `X´ del Obradoiro
Ahí, cuando todo parecía perdido y un último cuarto sin transcendencia se presentaba en el horizonte, resurgió de sus cenizas el Obradoiro. Llegó a disfrutar Burgos de 21 puntos de ventaja antes del despertar. Félix Alonso dio con la tecla al colocar a Brodziansky de `5´ y, con un pívot tan móvil, hicieron estragos en la defensa rival. Un recital desde el perímetro liderado por Nacho Varela y Micovic metió de lleno a los gallegos en la pelea en apenas tres minutos. Fueron siete los triples que anotaron en un espacio de tiempo muy breve que les permitió llegar vivos a los últimos diez minutos (70-62). Tras veinticinco minutos de travesía por el desierto, un pequeño oasis se les presentaba.
El sistema tenía un problema: Brodziansky no acostumbra a defender a cincos y Goloman, en el inicio del último cuarto, supo leer dicha situación. Él y la calidad individual de Gudmunsson y Cuevas, jugando juntos, conformaban la resistencia castellana. Remaba, pero no terminaba de romper la barrera de los cinco puntos el Obradoiro. Eso sí, a Burgos se le veía agobiado, obligado a subir un punto de intensidad que se veía reflejado en las cinco faltas cometidas a mitad del cuarto periodo. Aun así, el fondo de armario del líder es tal que no mostraban fisuras si Cremo tenía que pasar más minutos de la cuenta en el banquillo.
Morir en la orilla
El líder tan solo ha perdido un partido por algo. No es casualidad, sino causalidad. Y cómo juegan los minutos decisivos de los partidos es un factor crucial a tener en cuenta. Corbalán y Fischer, con dos buenas acciones consecutivas, abrieron de nuevo brecha (83-72) y Félix Alonso gastó su última bala a todavía cuatro para la conclusión. El encuentro, a partir de dicho momento, entró en una fase muy farragosa, pues con ambos conjuntos en bonus las visitas a línea de tiros libres eran continuas. Y, en medio del barullo que beneficiaba a los gallegos, Dani Díez hincó el diente de forma definitiva.
El experimentado jugador madrileño, con un triple marca de la casa, asestó el hachazo definitivo. Se lleva, así, un golpe de realidad un Obradoiro que sigue en línea ascendente, pero todavía insuficiente para luchar contra el mejor equipo de la categoría. Dispondrán, ahora, de dos semanas hasta su próxima cita con motivo de las ventanas FIBA. Burgos, por su parte, prolonga su año perfecto que, salvo sorpresa, desembocará en el ansiado ascenso directo a la ACB. En el regreso del parón de selecciones dispondrá de varios duelos con equipos de la parte alta en los que podría sentenciar la lucha por el primer puesto.
Para informarte minuto a minuto del deporte desde otra perspectiva, SIGUENOS en nuestras redes sociales: