El Málaga CF cierra un año que pasará a la historia tras el extraordinario ascenso a LaLiga Hypermotion. Un año en el que el malaguismo ha aumentado como nunca y ha vivido uno de los momentos más épicos de la historia del club
El ascenso a LaLiga Hypermotion
Sin duda alguna, el hito más destacado de este año ha sido el ascenso a LaLiga Hypermotion. Un ascenso que no fue nada fácil para el Málaga, ya que tuvo sus momentos buenos y sus momentos no tan buenos durante la temporada. La derrota ante el CD Castellón en la primera jornada de liga supuso un revuelo que con el paso del tiempo se fue disolviendo. El equipo castellonense era el rival a batir, siendo el líder durante toda la temporada prácticamente. El cuadro boquerón sabía cuál era el objetivo, ya sea ascendiendo de forma directa o en forma de play-off, el Málaga se veía obligado a regresar al fútbol profesional, y así fue.
Con esfuerzo, paciencia y humildad, los de Sergio Pellicer fueron generando un bonito sentimiento que se expandió por toda la ciudad. Aquello ya no era un equipo, sino una familia. La comunión que había entre afición y equipo era única. Todos a una para lograr el objetivo del ascenso. Finalmente, llegó la fase final de temporada, y el Málaga se clasificó para los play-offs de ascenso a Segunda División. En la semifinal se midió al Celta Fortuna, disputando la ida en Balaídos y la vuelta en una Rosaleda a rebosar. El conjunto blanquiazul logró el pase a la final tras imponerse 4-3 en el global.
Roberto celebrando el gol que le daba al Málaga el pase a la final del play-off de ascenso a LaLiga Hypermotion. Imagen vía: La Opinión de Málaga / Gregorio Marrero
Finalmente llegaba la hora de la verdad, la final de las finales ante el Nástic de Tarragona. Al haber quedado el equipo tarraconense por encima del Málaga en la clasificación, la vuelta se disputó en el Nou Estadi Costa Daurada. La ida en La Rosaleda se la llevaron los malagueños por 2-1. Un resultado que sabía a poco sabiendo que la vuelta iba a ser lejos de casa. El partido en Tarragona estaba siendo dominado por el Nástic, que anotó el primer tanto en el minuto 72′. Un gol que envió el partido a la prórroga, donde en los primeros minutos, Gorka Santamaría puso el segundo para los suyos y de esta forma, poner al Málaga contra las cuerdas. El equipo de la Costa del Sol necesitaba anotar dos goles para conseguir el ascenso, pero poco a poco se veía como cada vez era más complicado.
Dioni consiguió recoger un rechace para meter el primero y darle algo de esperanza al Málaga. Posteriormente, ocurrió lo que todos sabemos, los balones lanzados al campo. El partido se detuvo por unos minutos, amagando incluso con la suspensión del mismo. Tras varios minutos fuera del césped, el colegiado regresó al verde junto a los dos equipos para poner en marcha de nuevo el partido. Se acercaba el final y las posibilidades de ascenso para el Málaga cada vez eran menos. Hasta que apareció el héroe del ascenso: Antoñito Cordero. El canterano malaguista encontró un rechace para mandar el esférico al fondo de la red y de esta forma, darle al Málaga y a todo el malaguismo el ansiado ascenso. Sin duda alguna, aquel 22 de junio de 2024, será recordado para siempre en toda la historia del Málaga CF.
Celebración del Málaga CF en la final del ascenso a LaLiga Hypermotion. Imagen vía: Málaga CF
El regreso a Segunda División
Tras la inolvidable hazaña en Tarragona, tocaba planificar la siguiente temporada. Muchos jugadores como Genaro, Juande o Roberto, abandonaron el Málaga este verano. La marcha de Roberto, la más dura de todas, ya que se había convertido en un ídolo en la ciudad. Uno de los dilemas del verano era la continuación de Sergio Pellicer al cargo del equipo. Tras varias reuniones entre la directiva y el técnico de Nules, se tomó la decisión de que Pellicer siguiese en el Málaga. Loren Juarros se puso manos a la obra para reforzar el equipo de la mejor forma posible, con fichajes como los de Luismi Sánchez, Álex Pastor o Roko Baturina, entre otros. El objetivo era claro: lograr la salvación. La plantilla era prácticamente la misma que la de 1ª RFEF, con la incorporación de algunos fichajes nuevos.
La temporada arrancó y se veía a un Málaga que competía ante cualquier equipo. Durante las primeras jornadas, el equipo malacitano se mantenía invicto y estando en la mitad de la tabla. No fue hasta la séptima jornada cuando se encontraron con la derrota. Una derrota bastante dura en La Rosaleda ante el Elche, los franjiverdes golearon al Málaga 0-3. Posteriormente, el conjunto blanquiazul encarriló una racha de ocho partidos sin perder. La cosa se complicó en su paso por tierras valencianas. En una misma semana, los de Sergio Pellicer perdieron dos partidos ante Levante y Castellón, recibiendo más goles en esos dos partidos que en los últimos ocho.
El Málaga regresó con otra cara tras la sema fatídica en Valencia, consiguió dos empates y dos victorias hasta el día de hoy. La gran primera vuelta que ha cosechado el Málaga, ha hecho que muchos malaguistas piensen a lo grande, aunque el propio míster del Málaga ha contado en rueda de prensa que hay que ir con humildad, y que el tiempo dirá si se puede ser ambiciosos o no.
Celebración del gol de Roko Baturina ante el Real Sporting. Imagen vía: Málaga CF
No cabe duda de que este 2024 ha sido un año perfecto para el Málaga. El épico ascenso y el gran comienzo en LaLiga Hypermotion deja ver que este Málaga tiene presente y futuro. Veremos si 2025 supera o no a este gran 2024 malaguista.
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