Las lluvias torrenciales han obligado a que la organización tome la decisión de jugar partidos en pabellones con marcador manual
Shanghái, la ciudad más grande de China, es un referente internacional en tecnología y evolución. Sin embargo, durante la celebración del Masters 1000 de tenis, están dejando imágenes propias de otra época. Las torrenciales lluvias que se han propagado durante todo el fin de semana y este mismo lunes han impedido el correcto transcurso del torneo. Su pista central, valorada en 251 millones de euros, cuenta con un techo retráctil modernista que acoge a prácticamente 14.000 personas. Es la única de todas las instalaciones con la capacidad de cubrirse.
Las precipitaciones han obligado al aplazamiento de la mayoría de los encuentros. Ni los Sinner, Alcaraz, Medvedev y compañía, es decir, los que disputan todos sus choques en la central, van acorde al calendario. Pues sus potenciales rivales en las siguientes rondas no han jugado todavía. Monfils, el próximo rival de Carlitos, todavía ha certificado esta mañana su clasificación a los octavos de final. El martes era, precisamente, el día en el que se iba a disputar dicha ronda. Djokovic, por su parte, todavía se encuentra compitiendo en la tercera ronda.
El absoluto caos llevó a la organización a tomar una decisión límite. El lunes, tras ver los pronósticos meteorológicos, colocaron tres partidos en pistas de entrenamiento. Se tratan de unas canchas techadas, mucho más pequeñas que las exteriores y sin marcador electrónico. Es decir, el puntuaje se contaba de una forma manual con carteles, como si del siglo XX se tratara. De esta forma Bublik batió a Safiullin, Giron a Khachanov y Griekspoor a Thompson.
La suerte de que no sea mixto
Shanghái se va a salvar pese a la lluvia. Las previsiones meteorológicas no pronostican más precipitaciones hasta la final del domingo. Sacarán el torneo adelante gracias a la duración de este, a los tejemanejes de llevar partido a pistas de entrenamiento…y por tratarse de una competición únicamente masculina. La mayoría de los Masters 1000, como Madrid, son mixtos. Esto supone el doble de partidos por día o, lo que es lo mismo, el doble de suspensiones por jornada. Eso sí, se disputarán las cuatro rondas definitorias en los últimos cinco días.
En lo puramente deportivo, España cuenta con los representantes habituales a partir de los octavos de final. Alcaraz en individuales y Granollers en el dobles. Carballés, Davidovich y Munar cayeron a las primeras de cambio. Más allá del flojo que el desempeño de los españoles a nivel individual esta temporada, las condiciones de Shanghái tampoco les favorecen. Pista rápida, con una bola que exige imprimirle mucha potencia…circunstancias que se alejan de la tierra batida. Para la mayoría de ellos, la Copa Davis emerge como su gran objetivo en lo que resta de año.
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