El mal arranque en LaLiga, sumado a sus múltiples polémicas en las últimas semanas, están dejando en muy mala posición al astro brasileño
Vinícius Jr. está firmando un inicio de temporada por debajo de las expectativas. Su rendimiento con el Real Madrid no se corresponde al de un posible ganador del Balón de Oro, y los aficionados del conjunto blanco comienzan a impacientarse. El extremo brasileño ha sido titular en los cinco partidos disputados hasta el momento, promediando un total de 88 minutos por encuentro. Es el quinto jugador con más minutos de la plantilla, igualado con Mbappé. Sin embargo, aún no ha anotado ningún gol que no sea de penalti.
La temporada pasada, Vinícius tenía una media de 3 tiros por partido, de los cuales 1.5 iban a puerta. En la presente campaña las estadísticas indican que tira más (3.2 tiros por partido), pero con mucho menos acierto (0.6 a puerta). Esta falta de precisión se traduce también en el dato de goles por encuentro. El curso pasado anotaba un gol cada 125 minutos. En este, un gol cada 220 minutos. Desde los once metros, al menos, sí esta siendo certero. Vinícius ha ejecutado dos penas máximas, convirtiendo ambas.
En el apartado de creación de juego, al contrario de lo que pueda parecer, tampoco está destacando especialmente. En la temporada 23/24, Vini fue el jugador de LaLiga con más regates completados. Para ilustrar el mal inicio de temporada, basta con decir que hay tres jugadores que le han superado en esta faceta: Ejuke, Lamine Yamal y Mbappé. Por poner un ejemplo, el extremo del Sevilla lleva 17 regates, mientras que Vinícius lleva 13.
Una figura controvertida
Si algo está marcando el inicio de temporada de Vinícius, además del bajón de rendimiento, es la polémica. Empezando por sus declaraciones en la CNN, donde, haciendo referencia al racismo, dijo que «si en 2030 las cosas no evolucionan, habría que cambiar la sede del Mundial». Esto molestó a una parte de la afición madridista, además de a la población española, que lo consideraron un ataque directo a la candidatura de España, Portugal y Marruecos.
El pasado sábado se volvió a armar revuelo entorno a la figura del brasileño, cuando esté mandó callar a la grada del Reale Arena tras anotar el penalti que puso el 1-0. Estos gestos y acciones, lejos de ayudar a su causa, parecen estar perjudicando su rendimiento como futbolista. El clima de hostilidad que está creando, aunque no sea de forma intencionada, le afecta en el campo.
En el lado positivo, el brasileño sigue contando con el apoyo de sus compañeros. Uno de los capitanes del equipo, Dani Carvajal, salió en su defensa en rueda de prensa: «Se ve y desde dentro lo vimos (insultos hacia Vinícius). Al final cuando a uno le pinchan, sangra». Palabras como las del lateral madridista ilustran la unión que hay en el vestuario, algo que será clave para reenganchar a Vini, y que vuelva a su máximo nivel.
El defensa español del Real Madrid, Dani Carvajal, da una rueda de prensa antes del partido de UEFA Champions League ante el Stuttgart VFB en Valdebebas, a las afueras de Madrid, el 16 de septiembre de 2024. (Fotografía de Thomas COEX / AFP) (Fotografía de THOMAS COEX/AFP via Getty Images)
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