El quarterback ha acordado prolongar sus servicios con la franquicia de Míchigan por 4 años más, durante los que se embolsará 212 millones de dólares
Jared Goff ha encontrado su casa. El mariscal de campo de 29 años ha firmado una extensión de contrato con los Detroit Lions hasta 2027 y con opción para 2028. Goff se embolsará 170 millones de dólares garantizados y la cifra puede ascender hasta los 212 millones, convirtiéndose en el segundo QB mejor pagado de la NFL por detrás de Joe Burrow. El equipo dirigido por Dan Campbell expresó en marzo su interés por renovar el contrato del quarterback. Su rendimiento en Detroit ha hablado por él, pues el general manager Brad Holmes afirmó la semana pasada que el dorsal 16 «se lo ha ganado».
El pick número 1 de 2016 ha encontrado su casa
Los Angeles Rams seleccionaron a Jared Goff en el número 1 del Draft de 2016. Pese a mostrar un talento digno de su elección, el quarterback no se encontraba cómodo en el esquema de Sean McVay, así que la franquicia angelina decidió traspasarlo a Detroit en 2021 a cambio de Matthew Stafford. Aquel intercambio dio sus frutos para los Rams con el título de la Super Bowl LVI (2022), en la que vencieron a los Cincinnati Bengals. Se consideró que ambos conjuntos salieron ganado de aquel canje. Tras tres temporadas vistiendo la camiseta de los Lions, Goff se ha consolidado como un activo imprescindible de la plantilla. En el pasado curso 2023, en el que sumó 4.575 yardas de pase para 30 touchdowns y solo 12 intercepciones, logró liderar a los Detroit Lions hasta el Campeonato de la NFC. Sin embargo, terminaron sufriendo la remontada de los San Francisco 49ers de Brock Purdy y Kyle Shanahan a las puertas de la Super Bowl.
Habiéndose oficializado un secreto a voces como lo es la extensión de Goff, los aficionados de los Lions tienen motivos para sonreír. El proyecto de Detroit se ha afianzado a su pieza angular para los próximos cuatro años y está rodeada de talentos ofensivos como el receptor Amon-Ra St. Brown, el running back David Montgomery y el tight end Sam LaPorta. Además, con los uniformes y la apariencia renovada para la próxima temporada, la franquicia de Míchigan afronta una nueva etapa con licencia para soñar con llegar a la gran cita del fútbol americano. Se trata de uno de los cuatro equipos de la NFL, junto a los Cleveland Browns, Houston Texans y Jacksonville Jaguars, que nunca han alcanzado una Super Bowl.
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