Tomas Vaclik demostró sus grandes condiciones en el Elche – Albacete con intervenciones de mérito para impedir un mayor número de goles encajados
El guardameta checo llegó al Albacete Balompié para dar un salto de calidad en la portería albacetista. Era una de las posiciones más damnificadas a lo largo de la presente temporada. El Albacete Balompié ha sido -por momentos- el equipo más goleado de toda la categoría. Son 100 los goles encajados en los 78 encuentros de Rubén Albés como técnico del club manchego.
El año pasado, el Albacete «canalleta» de Rubén Albés consiguió aplacar ese punto negativo del esquema del técnico gallego: la defensa. Este año se está viendo cómo el Albacete no es capaz de compensar la defensa con el ataque, por ello es fundamental la buena actuación del portero. El checo realizó varias paradas de mérito, un mano a mano a Tete Morente, una mano abajo seguida de otra parada a bocajarro -aunque esta última fue anulada por fuera de juego- y también estuvo a punto de impedir el tercer gol -obra de Mourad-, el potente disparo fue repelido por el guardameta, pero el rechace tras dar en el palo dejó vencido a Vaclik.
Tomas Vaclik es un portero con una trayectoria más que reconocida trayectoria. Sus cuatro años en Sevilla -con una Europa League de por medio- y sus importantes participaciones con su selección avalan la experiencia y calidad del actual portero del Albacete Balompié. De hecho, la razón de que Vaclik esté en Albacete es que el portero espera jugar la próxima Eurocopa, por ello quiere continuidad. En Albacete la está consiguiendo.
