El Manchester United atraviesa uno de los peores momentos de su historia tras quedar eliminados, una vez más, en fase de grupos de la Champions League
El tiempo pasa y la historia solo la recuerdan los que lo han vivido. A pesar de haber sentido la grandeza, de estar en lo más alto del fútbol inglés y de ser el rey de Europa, el Manchester United se ha convertido en un rival más para muchos equipos. Antes, pocos se querrían enfrentar a los diablos rojos, pero ahora pocos son los que les tienen pudor. Sin embargo, la realidad es que los que algún día ganaban ‘orejonas’ ahora están eliminados y no clasificarán para octavos, ni para Europa League.
El equipo de Ten Hag no solo se ha quedado fuera de la elíte del fútbol internacional. El problema es que lo ha hecho siendo inferior en un grupo ‘cómodo’ para los ingleses. A priori, el Bayern de Múnich era el favorito a ser primero de grupo y, así ha sido. A su vez, Galatasaray y Copenhague eran los equipos que iban a pelear hasta el final por una tercera plaza por detrás de los alemanes y del Manchester United. No obstante, el fútbol ha vuelto a enseñarnos que el nombre es importante, sí. Pero en el campo juegan once jugadores y los de Old Trafford no han demostrado ser superiores.
Y no es una casualidad, si nos vamos a ediciones anteriores, el Manchester United lleva años sin demostrar su grandeza por Europa. Si ignoramos sus participaciones en Europa League y nos centramos en sus clasificaciones a la siguiente ronda de Champions League nos asombramos aún más. Hace dos temporadas llegaron a octavos, pero quedaron eliminados en esa misma eliminatoria. Nos tenemos que ir hasta la temporada 2018/2019 para ver a los diablos llegar una ronda más, en cuartos quedando eliminados por el FC Barcelona. Algo es evidente, y es que cada vez queda menos recuerdo del verdadero Manchester United.
La Premier League, otro dilema
La competición liguera es lo único positivo en lo que fijarse para el club de Manchester. A tan solo tres puntos de Europa y cinco de Champions League, deja a los de Ten Hag con posibilidades de terminar bien el año. El problema son las sensaciones de juego ya que no se aspira a mucho más. Además, los pobres resultados sin alcanzar una superioridad frente a los rivales y las derrotas contra los equipos de arriba refleja la poca confianza de los aficionados.
La Premier League no para, ni mucho menos para navidades. Antes de terminar el año quedan cuatro partidos ligueros. El próximo choque para los diablos será el Liverpool, el líder de la competición. Una prueba de fuego en Anfield que podría cambiar el rumbo. A su vez, West Ham, Aston Villa y el Nottingham serán los rivales de un Manchester United que tiene que cambiar mucho para volver a ilusionar a su gente.
