Koke suma 600 partidos como jugador del Atlético de Madrid con su renovación en el aire. El capitán quiere seguir en el Atleti, pero considera irrisoria la oferta presentada por el club.
Koke es Atleti. El Atleti no se entiende sin Koke. El capitán es, desde hace mucho tiempo, el jugador con más partidos de la historia en el Atleti. Un logro que todo jugador quiere lograr al llegar a un club, una cifra que todo canterano sueña con tener en las vitrinas de su equipo. Koke es uno de esos one club man que ya parecíamos tener olvidados, de esos jugadores que parecían haber dejado de existir desde los años 80 y 90. Pero, para él no todo es dinero, no todo son los títulos, para él su mayor título es haber jugado en el Atleti. Qué suerte tenemos de tener a Koke con nosotros.
No corre. Está sobrevalorado. No tiene nivel para el Atleti desde hace años. Frases que se escuchan desde atléticos y no tan atléticos hacia un jugador que simboliza todo lo que es el Atleti. Porque si decimos que sin Simeone no nos imaginamos al actual Atleti, Koke debe estar sentado a su derecha. Pero es que además Koke es el corazón de este Atleti, y ya no por sentimiento sino por fútbol también. Desde las botas del 6 se inician todos los ataques rojiblancos. Desde las botas del 6 se destruyen un gran número de las acciones ofensivas de los rivales. Desde las botas del 6 se corrigen todos los errores de sus compañeros. Desde las botas del 6, el Atleti se hace más grande. Porque el Atleti sin Koke es mucho peor, ya sea en sentimiento o en fútbol.
Koke se merece su renovación
Los 600 partidos de Koke han llegado en, seguramente, uno de los momentos con más dudas para el capitán. No por su nivel futbolístico, porque desde hace un año es excelente, sino por esa oferta de renovación que no llega y si llega no cumple ni de cerca lo que Koke se ha ganado y sigue ganándose en el campo. Porque con Koke no debe haber dudas. Si Koke se va, dos rayas rojiblancas del escudo desaparecerán, porque aunque el club esté por encima de los jugadores, el capitán es una de las patas más importantes para sujetar los cimientos de este Atleti.
Todos los jugadores deben hacer un esfuerzo, y el capitán debe ser el primero en realizarlo. Pero, también debe ser el primero en tener un pequeño reconocimiento por todos estos años de servicio al club. El dinero no es un problema para él, ya lo demostró hace unos años cuando rechazó al Barça, aun duplicándole su salario de por aquel entonces. Él quiere sentirse lo importante que es para el grupo y la afición tener a un jugador como él entre sus filas. Un rojiblanco de cuna que triunfó y seguirá triunfando durante años en el club de su vida. Larga vida al rey. Larga vida a Koke.
