Jalen Williams, se convirtió en Michael Jordan, para liderar a los suyos en el quinto partido de las Finales
Todo llegaba empatado a Oklahoma, 2 a 2, y todo estaba por decidir. En la NBA, quién gana el quinto partido de una serie, cuando esta llega igualada, termina venciendo el 70% de las ocasiones. Haciendo caso a esta estadística. Los Thunder tienen todo para ganar el sexto partido de la serie y conseguir el primer anillo de la franquicia en la ciudad. Sin embargo, los Pacers no han dicho la última palabra, y ayer, compitieron hasta el último cuarto. A pesar de que su máxima estrella, Haliburton, solo anotó 4 puntos.
No fue el mejor partido del base, que fallo todo lo que lanzaba, literalmente, 0/6 tiros de campo y 0/4 en triples. Sus puntos, todos, llegaron desde la línea de tiros libres. En uno de los peores encuentros que se recuerdan de la carrera de Haliburton. Que, quizás si, esté sobrevalorado, como lo ven sus compañeros de liga, en la encuesta anual entre jugadores de la NBA. Quién intentó, todo para no irse del partido y conseguir la victoria, en Indiana, fue «El Profesor», T.J McConnell. El base suplente anotó 18 puntos, cogió 4 rebotes y dió 2 asistencias. Logrando 10 puntos de manera consecutiva para mantener con vida a los suyos.
Locura Williams
Sin embargo, delante había un hombre con una misión. Con la canasta entre ceja y ceja, e incapaz de fallar. Jalen Williams anotó 40 puntos, en una de las mejores actuaciones individuales que se recuerdan, últimamente, en las Finales. Además, de 6 rebotes y 4 asistencias.Tampoco estuvo mal acompañado por Gilgeous-Alexander con 31 puntos y 10 asistencias. Ambos miembros del backcourt de Oklahoma, se combinaron para 71 de los 120 que anotaron los Thunder. La serie vuelve a Indiana para el sexto partido y los Pacers tienen la dificil empresa de forzar el séptimo partido.
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