La puesta en venta del club, una afición saturada y el equipo colista conforman una situación insostenible en Valencia
El Valencia CF ha cerrado la décima jornada de liga con pésimos registros en diversos ámbitos. El conjunto che, con la derrota ante e cuadro canario, se postula como el segundo peor Valencia de la historia en la jornada 10 (1V, 3E, 6D), solo por detrás del de la temporada 57/58 (0V, 5E, ED). Además, el equipo cierra la jornada como último clasificado, algo que no ocurría desde el año del descenso, en la 1985/1986.
Por otro lado, la afición protestó dentro y fuera del campo contra la propiedad y directiva, generando una sensación insostenible. La impotencia, tristeza o enfado fueron los principales sentimientos que florecieron dentro y en los alrededores de Mestalla. Sonoras pitadas, cánticos y pañoladas inundaron las gradas del feudo valencianista en una noche de fútbol donde no salió nada positivo a excepción de regreso de Gayà.
El descenso, una opción más real que nunca
Si bien es cierto que tanto individualmente como colectivamente, la plantilla del cuadro che no es ni mucho menos para pelear con dificultad la permanencia. La realidad es que la sexta plantilla con más valor de Primera División es una y lo que se ve en el terreno de juego es otra. Un equipo que tiene miedo por la situación interna y externa, que se refleja en jugadas como en el mano a mano entre Hugo Duro y Javi Guerra, que desaprovechan un gol cantado.
VALENCIA, SPAIN – OCTOBER 21: Hugo Duro of Valencia CF (obscured) reacts on the final whistle inthe LaLiga match between Valencia CF and UD Las Palmas at Estadio Mestalla on October 21, 2024 in Valencia, Spain. (Photo by David Ramos/Getty Images)
Esta crisis que afecta en lo deportivo perjudica directamente a Peter Lim, que con el club oficialmente en venta, debe evitar a toda costa un descenso que sería fatal económicamente para el club. Además, impediría una venta que al parecer, está más cerca que nunca, aunque aún sigue lejos.
El primer interesado en salir de la zona baja es el máximo accionista, que ajeno a toda realidad en clave Valencia, no puede consentir un descenso que aleje las posibilidades de desvincularse del club. Es evidente que el Valencia necesita entrar en el mercado de invierno, donde se verá la verdadera necesidad de una entidad que tiene posibles compradores y necesitada de refuerzos.
Rubén Baraja en tierra de nadie
El dilema que presenta el Valencia con Baraja, entrenador y leyenda valencianista, salpica a todas las partes que rodean la atmósfera che. La directiva no puede cesarlo tan fácilmente, ya que este despido ascendería a los 5 millones de euros, una cantidad actualmente elevada para el club. Por otro lado, ya no es que no puedan despedirle, sino que se sigue confiando en el ‘Pipo’ y él confía en sí mismo y en sus jugadores.
En la afición hay una división de opiniones. El cariño y respeto que se tiene hacia el actual míster es enorme, pero el debate entra en esos sentimientos hacia él o en el amor al club. Lo que es menester es que en Valencia la situación es insostenible, y a corto, medio y largo plazo, todo se puede ver trastocado en función de los próximos pasos de la propiedad, directiva y plantilla.
LEGANES, SPAIN – OCTOBER 04: Valencia CF Manager Rubén Baraja acknowledges the fans after the LaLiga match between CD Leganes and Valencia CF at Estadio Municipal de Butarque on October 04, 2024 in Leganes, Spain. (Photo by Gonzalo Arroyo Moreno/Getty Images)
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