Marcus Morris y los New York Knicks vuelven a juntar sus caminos casi cinco temporadas después, aunque la historia no es tan bonita como parece porque el ala-pívot ha firmado un contrato no garantizado
El equipo neoyorquino anunció que Morris habría firmado un Exhibit 9. Este es un contrato por un año no garantizado que protege al equipo en caso de una lesión grave. Una decisión muy inteligente por parte de los Knicks tras lo sucedido la campaña anterior. Sobre todo, teniendo en cuenta que su pívot de referencia, Mitchell Robinson, es un jugador muy propenso a lesionarse, y que la temporada pasada tan solo disputó 31 encuentros. Desde luego que si termina formando parte del ‘roster’ de los Knickerbockers será un refuerzo de lujo para las posiciones interiores.
Dos jugadores para un solo puesto
Morris no es el único jugador que ha firmado un contrato no garantizado con los New York Knicks. En el otro lado de la historia, tenemos al ex de Washington Wizards, Landry Shamet. Un perfil totalmente diferente al de Morris. Shamet es un escolta de 1,93cm que nunca ha llegado a tener un rol solido en ninguno de los seis equipos en los que ha jugado. Cumplirá 28 años el año que viene, por lo que es un jugador con mucho futuro todavía. Morris y él no juegan ni en la misma posición ni están en el mismo momento de su carrera, pero aún así están compitiendo por el mismo puesto.
Lo que está claro es que los del Madison están mucho más faltos de interiores que de exteriores. Entre bases y escoltas, que son las posiciones por las que se podría mover Shamet, cuentan con Jalen Brunson, Donte Divincenzo, Miles McBride, Cameron Payne y Mikal Bridges. Mientras que en el juego interior tan solo cuentan con Julius Randle, Mitchell Robinson, Precious Achiwa y Jericho Sims. La diferencia de nombres es bastante notable.
Un veterano con palabras por decir…
La incorporación de Morris a los Knicks tendría un efecto mucho más importante en el área de la veteranía y de la experiencia que en la del propio juego. Es uno de esos jugadores que ha pasado por tantos equipos y ha estado en tantas situaciones que se las ha visto de todos los colores. De hecho, fue campeón con los Lakers en el año de la burbuja, es decir, la temporada 19-20. Veremos que es capaz de aportar el veterano Morris a unos Knicks que aspiran a todo la próxima temporada.
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