Míchel Sánchez, técnico del Girona, atendió a los medios de comunicación tras la contundente derrota de los suyos frente al FC Barcelona (1-4)
Balance del encuentro: «Hemos estado muy lejos de poder hacerles daño. El plan de partido no ha salido bien y no hemos encontrado dónde poder hacerles daño en la primera presión que hacen. Han sido muy superiores, no hemos hecho las cosas bien, pero no puedo decir nada negativo de mi equipo, el tercer y el cuarto gol sí. En ese aspecto estoy preocupado porque el equipo no se encontraba bien y me duele».
Dificultades en la presión: «La nuestra tampoco ha sido buena y no hemos tapado los espacios por dentro. Los dos primeros goles son perdonables 100% porque yo pido eso. Me preocupa mucho el tercer y cuarto gol porque me hacen daño a mí, no me gusta que no se defiendan bien los espacios sectoriales. En el descanso les he dicho que somos el equipo que se instala más en campo rival, pero hemos dado solo 22 pases, muy lejos de nuestras cifras».
Salida de balón: “Teníamos situaciones de poder sacar de zona los dos centrales y que Koundé no pudiera dar el paso. Lo hemos logrado alguna vez, pero no hemos superado la primera línea de presión. Podíamos generar alternativas con balón largo… bueno. Había un plan de partido . El Barça nos ha superado en lo táctico, yo soy el responsable. Evidentemente hoy la pizarra no ha salido como yo quería”.
Gol más doloroso: “Quizás el tercero es el que acaba con las ilusiones sobre todo por cómo se produjo con rupturas de segunda línea. Las trabajamos y no lo hemos hecho bien ni con Pedri ni con Olmo. Esas situaciones no me han gustado nada. Tenemos que perseguir marcas y controlar las segundas líneas. Los dos primeros goles son dos jugadas que pueden suceder. Puedes cometer errores o defender mal un balón parado. Los otros dos sí que no me han gustado”.
Míchel, sobre el penalti de Íñigo Martínez: «Interpretan que el brazo está en posición natural y viene de un compañero. Si lo pitan, te puedes meter en el partido, pero en el minuto 2 o 3 ya veía que no íbamos bien. Tengo que volver a ver el encuentro y del penalti he pasado página muy rápido».
El debut europeo, a la vuelta de la esquina: «Nos ganamos el derecho de jugar partidos como el del miércoles ante el PSG, pero sabemos que la prioridad es LaLiga. Todo es positivo, todos, los jugadores y yo como entrenador, soñamos con el himno de la Champions. Lo grande será cuando venga el Feyenoord a Montilivi, pero toca trabajar y acercarnos a rivales que son superiores a nosotros».
Míchel y la suplencia de Yangel Herrera: «Si hubiera sido una final, nos lo hubiéramos planteado. El riesgo de perderlo mucho tiempo ha pesado y le hemos dado confianza a otros jugadores. Asprilla tiene 20 años; Arnau, 21; Solís, 19… Si pudiéramos comprar gente de 60 millones de euros les pediríamos rendimiento inmediato, pero sabemos lo que hacemos, estamos en crecimiento y los futbolistas que tenemos también. Estamos lejos del Barça, yo de los entrenadores top y hay que trabajar mucho más».
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