Carolina Marín, campeona olímpica en Río 2016, ha accedido a las semifinales en París tras deshacerse de la nipona Ohori (21-13, 21-14)
Carburando y directa a por el oro, ese está siendo el camino de Carolina Marín en París 2024. La onubense, triple campeona del mundo y campeona olímpica hace ocho años, luchará por las medallas este domingo tras dar su mejor versión en los cuartos de final. Ohori, octava cabeza de serie del torneo, apenas ha podido hacer frente a una española que hoy ha brillado con luz propia, dominando desde el fondo de pista en todo momento.
La japonesa ya sabía lo que era ganar a Carolina Marín y, tras un irregular choque de la onubense en octavos de final, donde sufrió lo indecible para derrocar a la norteamericana Zhang, Ohori ganaba muchos enteros. Sin embargo, se ha tratado de un monopolio de cabo a rabo en el que los graznidos de la española resonaban después de cada punto. Los nervios hoy no les han jugado una mala pasada, pues ha construido su juego a partir de la paciencia, haciendo correr muchos metros a su oponente para cerrar los puntos a placer.
Ambos sets se han desequilibrado desde bien temprano, hecho que le ha otorgado una tranquilidad extra a nuestra representante, quién ha sabido gestionar la ventaja a las mil maravillas. Ni se inmutó si quiera cuando ya iba lanzada a por la victoria en la segunda manga y la nipona le endosó un 4-0 de parcial para meterse de nuevo en la pelea. Reaccionó como lo que es, una campeona, y del 11-9 pasamos al 21-14 en apenas un cuarto de hora.
Única no asiática en pie
Carolina Marín es una rara avis dentro de un deporte, como es el bádminton, dominado por los asiáticos. En octavos de final ya era la única europea, compartiendo el privilegio de ser la única no asiática junto a Zhang, su rival en dicha ronda. Al ser el duelo entre ambas, tan solo una pudo quedar en pie y la española se quedó desamparada ante la tiranía asiática. Ahora, en semifinales, espera rival del enfrentamiento entre Chen Yu Fei y He Bing Jiao, ambas chinas. La primera, segunda cabeza de serie del torneo, es la favorita sobre el papel.
Por la parte de arriba del cuadro se verán las caras la surcoreana An Se-Young, número 1 del mundo, y la indonesia Gregoria Mariska Tunjung. Sean cuales sean sus rivales en la lucha por las medallas, Carolina Marín está más que preparada para repetir la gesta ocho años después, el nivel desplegado hoy así lo evidencia. Mañana, seguramente a mediodía, gozará de una nueva oportunidad de hacer historia, de convertirse en una de las mejores badmintonistas de la historia.
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