Pese a la derrota en su debut como técnico azulgrana, la imagen del equipo fue positiva a grandes rasgos
El Eldense de Dani Ponz tuvo su primera prueba el pasado domingo. Pese a la derrota frente al Sunderland, en el Pinatar Arena se comenzaron a intuir algunos de los cimientos sobre los que el técnico valenciano trabajará en el Deportivo. Presentado ya hace prácticamente un mes, si algo dejó claro en su primer día como capitán del barco azulgrana es que no piensa desaprovechar la oportunidad de debutar en Segunda División.
En el Pinatar Arena, las gradas están muy cercanas al terreno de juego, lo que posibilita seguir con cierta facilidad las indicaciones de los entrenadores a sus futbolistas. En este aspecto, Ponz destacó el domingo en dos principales aspectos: su insistencia a la hora de sacar el balón jugado y la intensidad que reclama a sus jugadores a la hora de presionar la salida rival.
Combinar desde la base de la jugada y presionar la salida rival
En la primera parte con Íñigo Piña, Youness y Miguel Marí (jugó como lateral izquierdo) y en la segunda con Dumic, Timor (como central) y Marc Mateu, el Deportivo sacó el balón con tres defensores, acumulando futbolistas en el costado derecho y dejando el flanco izquierdo en su totalidad para Simo durante los primeros 45 minutos, quien estrelló un balón contra el larguero, y para Joel Jorquera en la segunda parte. Queda pretemporada por delante para analizarlo, porque resultó ser bastante curiosa.
Por otro lado, la presión asfixiante a la que acostumbran los conjuntos dirigidos por Ponz. Fruto de la misma, Simo robó, jugó con Juanto e Íñigo Piña anotó el primer gol de la pretemporada azulgrana. No es casualidad que el central del Deportivo ocupara esa demarcación a la hora de definir, ya que siguió la marca del atacante del Sunderland hasta la frontal del área del área rival. Hasta el momento, pocas certezas. Pero se antojan prometedoras.
