Alcaraz, Sinner y Medvedev no fallan sus respectivos choques de primera ronda y caminan firmes hacia la segunda semana de Wimbledon
La acción arrancó desde bien temprano en el All England Club de Londres, una de las instalaciones más prestigiosas y míticas dentro del deporte de la raqueta. Todos los jugadores, vestidos de un blanco impoluto, saltaban a la pista con la ilusión, motivación y respecto que supone jugar en un torneo de esta índole. Sin embargo, la mitad de ellos ya están a estas horas recogiendo sus maletas y regresando a sus casas, dolidos por el poder de la derrota. No es el caso del vigente campeón, Carlos Alcaraz, quién se deshizo de Lajal en tres luchadas mangas.
El otro gran favorito y potencial rival de Alcaraz en `semis´, Jannik Sinner, se impuso a un correoso Hanfmann en cuatro sets y ahora le tocará verse las caras con Matteo Berrettini, su compatriota y amigo. El veterano italiano está de vuelta al circuito, recuperando las sensaciones que la auparon hasta el top 10 y en la tarde de hoy logró derrocar a Fucsovics con aparente facilidad. De cara al duelo del miércoles, Jannik parte como favorito, aunque a buen seguro que Matteo le plantará mucha batalla.
Harris, una victoria mejor que la de Alcaraz
Tan solo dos cabezas de serie cayeron en esta primera tarde de acción, no pudiendo considerándose ninguno de ellos como sorpresas. Mario Navone cedió en tres sets frente a Sonego, continuando así con su desastrosa racha sobre hierba en la que no consigue ganar ni un solo encuentro. Shapovalov, por su parte, envió a Jarry antes de tiempo para casa desplegando un juego exquisito que, de mantenerlo, le puede llevar a las rondas de prestigio del torneo. Medvedev y Ruud, los otros dos grandes favoritos en cuanto a ránking, apenas tuvieron que sudar para deshacerse de Kovacevic y Bolt respectivamente.
Alcaraz, Sinner, Dimitrov…muchos de los grandes debutaron, pero el partido de la jornada lo firmaron Harris y Michelsen. El sudafricano se llevó el gato al agua tras remontar dos sets y cerrar el choque con un punto antológico en el super tie-break de la quinta manga. Fue el primero de tres partidos que tuvieron que acudir al agónico desempate para desequilibrar la balanza. Los otros vencedores en dicha casuística fueron Vukic frente a Ofner, emparejamiento que dirimía el rival de Alcaraz, y Cazaux frente a Bergs.
Badosa, cada día mejor
Paula solo hace que dar pasos hacia delante en su regreso a las pistas. Es consciente de que necesita sumar puntos, de que se le acaban las oportunidades de acceder a los torneos mediante ránking protegido y es, quizás por ello, por lo que salta a la pista con una dosis de hambre extra. El sorteo le emparejó con Muchova y, aunque es cierto que la checa está muy lejos del nivel de antaño, Badosa supo sacarle todas las debilidades a relucir. Ahora tendrá que enfrentarse a su compatriota Fruhvirtova, a quién puede superar si muestra el nivel de esta tarde.
La otra española, Sara Sorribes, cayó de forma clara ante Paolini, la reciente finalista de Roland Garros. Y, es que, al igual que en el cuadro masculino, las sorpresas brillaron por su ausencia a excepción de la derrota de Zheng a manos de Radovcic. Gauff, Sakari, Keys…todas ellas accedieron a segunda ronda sin mayores problemas, sabedoras de que la baja de Sabalenka les abre las puertas de la final de par en par. Una ronda a la que, por qué no, podría llegar Raducanu, quién, pese a vivir con el foco mediático encima, muestra una sensación vertiginosa de mejora.
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