José Ramón Sandoval, técnico del Granada, ha comparecido ante los medios de comunicación en la rueda de prensa previa al partido contra el Girona
Disponibilidad del equipo y más jugadores del filial: «Cada vez se está estrechando más el cuello de la camisa, cada vez hay más bajas. Vamos a llevar los que el parte médico me diga, pero hay bastantes jugadores con dudas. Ayer tuvimos que subir a cinco chicos del filial. Vamos a ver cuántos podemos juntar para ir a Girona a jugar».
Valoración numérica de su trabajo: «Esto es como la historia del elefante encadenado, vine a intentarlo y lo he intentado. El que lo intenta con el corazón si no consigue el objetivo hay que volver a intentarlo. Hasta el último partido voy a intentar ganar un partido fuera de casa. Es lo que me queda que mejorar respecto a otros entrenadores que han estado aquí esta temporada, no tengo otro objetivo más que hacer».
Bajada de intensidad desde que no hay opciones: «A partir del partido contra el Sevilla, ese día nos llevamos un mazazo porque el Celta jugó antes y le ganó al Villarreal en el último momento. Ese día en la charla ya notamos a los jugadores que pelear por el objetivo era en vano. A partir de la segunda parte vinieron todos los fantasmas de atrás y vi al equipo, lógicamente, bajar los brazos. Cuando peleas por un objetivo está viva la cosa y tu mensaje llega mucho, pero cuando ese objetivo se va todo son objetivos individualizados. El día del Madrid cuando sales con un descenso en la cabeza hace que las piernas no vayan como tienen que ir. Te dejas llevar por muchas cosas y están deseando que esto acabe cuanto antes».
El Girona: «Es un cúmulo de muchos aciertos. Cuando un entrenador estaba perseguido por todo el mundo por los resultados creyeron en su trabajo en el momento más difícil y apostaron por el proyecto. A partir de ahí, surgieron resultados, aciertos en fichajes, jugadores que han rendido por encima de sus posibilidades y, sobre todo, la filosofía de su entrenador, que busca sacar lo mejor de cada jugador para el beneficio del grupo.
«La leyenda de este Girona va a seguir creciendo. Todo el mundo decía que el Girona se iba a caer, pero analizando tácticamente al Girona hemos visto que es muy difícil encontrar un punto débil. En todas las facetas se sienten ganadores, son descarados, van a por ti y te llevan a desordenarte. Intentaremos morir con un tiro en el pecho, trataremos de ser descarados».
La posibilidad de quedar últimos: «No me preocupa esa posibilidad porque no la tengo en mente, sé que existe, pero dependemos de nosotros mismos y es por lo que vamos a luchar con orgullo. A eso nos tenemos que agarrar. Vamos a ir a luchar por quedar lo mejor posible por el bien del club económicamente y por nuestro bien. A nadie le gusta quedar el último y eso no tiene que pasar por ninguna cabeza granadina».
Mensaje a los abonados de cara a la campaña de abonos: «El único que ha triunfado este año es el aficionado del Granada, a cambio de nada siempre ha estado a nuestro lado. Ellos mismos van a ser los primeros que van a intentar que el Granada esté en Primera División, van a estar al pie del cañón y van a interesarse por abonarse porque si algo ha aprendido este escudo y este club es que ha resurgido de las cenizas. Si les voy a dar las gracias por todo el cariño que me han dado y por haber disfrutado todo este tiempo con ellos. Sin esa gente detrás es difícil disfrutar de ese trabajo, me han hecho más fácil mi estancia en Granada».
Su futuro: «No cambio el mensaje. Tengo una conversación muy fluida con la gente del club. Ahora lo más importante es acabar y volver a empezar por el bien del Granada. Cuando esto acabe esa conversación fluida llevará a otra conversación más, pero mi mensaje es que vine aquí para intentarlo en diez partidos y así lo hemos hecho. No voy a exigir nada, ni a precipitar nada. Tengo que agradecer al club por darme la oportunidad otra vez de volver a reencontrarme con mi gente y de trabajar con la gente del club. Es lo más maravilloso que me ha pasado en la vida y es el gran valor de este club, y que no se debe desaprovechar».
