La renovación del director deportivo, José Manzanera, es el primer paso para comenzar a trabajar de cara a la próxima temporada
La Cultural es un equipo que acostumbra a desarbolarse cada verano, teniendo que unir las piezas del puzzle de nuevo. Sin embargo, parece que la figura del director deportivo sí que se está queriendo asentar y, a través de Manzanera, conseguir esa estabilidad que una categoría como la 1ª RFEF pide a gritos. El valenciano, que ya acumula dos temporadas en la entidad culturalista, firma por una más otra opcional, pudiendo convertirse en el director deportivo más longevo de las últimas décadas.
La situación del equipo dirigido por Raúl Llona ha pasado de la desesperación a la ilusión en tan solo una semana. La actitud, orgullo y buen juego demostrado ante la Real B ha provocado que afición y equipo no den por perdida la temporada y vayan a luchar por disputar los playoff que ahora observan a cuatro puntos de distancia. Un momentum, con todos los jugadores concentrados en lo que les ataña, que seguramente oficializará las decisiones unas cuantas semanas, motivo que no exime a Manzanera de su actividad.
¿Quién tiene contrato asegurado?
Aunque son pocos los jugadores con un contrato más allá del 30 de junio, sí que los hay. En primer lugar, hay que hablar de Santi Samanes, el todavía pichichi hasta los dos goles de Solar frente al Lugo. El león de Berriozar sigue recuperándose de la rotura de ligamentos con mimo, pensando ya en 2025, año hasta que renovó gracias a un bonito gesto del club después de que se lesionase.
El jovencísimo capitán, el leonés del que toda la ciudad está orgullo, Rodri Suárez, es otro de los fijos para el próximo año. El canterano alargó este mismo verano su alianza con la Cultural hasta 2026, fecha hasta la que también estará en León, a priori, Kevin Presa. El gallego tiene la ilusión de convertirse en una institución y el líder que lleve a los leoneses a La Liga Hypermotion. Firmó este verano una ampliación de 2+1, por lo que, si nada se tuerce, la Cultu tendrá Kevin para rato.

La otra gran apuesta de Manzanera durante este verano fue Nico Toca. El cántabro que llegó a sus 18 años a la capital leonesa ha dado pasos de gigante esta temporada gracias, en parte, a Raúl Llona. El míster riojano decidió que Nico debía estar en el primer equipo y, tras muchos meses sin disputar minutos y trabajando en la sombra, ha sacado su mejor versión a final de temporada. Por el momento está atado hasta 2026, veremos sino se amplía.
Llona, Bañuz, Fornos…mucho trabajo para Manzanera
Salvo catástrofe el aroma que respira el club es el de querer contar con su técnico una temporada más. La Cultural ha pecado durante los últimos años en exceso a la hora de cambiar de míster, sin dar tiempo a madurar una idea de juego. Ahora parece que Llona es el adecuado a, independientemente de si se asciende o no, asentar su propia filosofía también la próxima temporada con algún que otro refuerzo.
El mejor jugador de toda la temporada, o al menos el más regular, ha sido Miguel Bañuz. El guardameta, lesionado de su muñeca izquierda, ya ha expresado su intención de sentarse con el club a final de temporada. Es, junto a Quique Fornos, la renovación que más se pide desde el lado de la afición, pero son futbolistas con una dilatada carrera a los que, si les aparece una oferta de una categoría superior, es difícil que puedan decir que no.

Barri, Bicho, Calderón…son bastantes los que quizás han hecho méritos para recibir la oferta. Sin embargo, todo dependerá también del presupuesto e inversión que decida inyectar Aspire en las arcas de la cultural. A partir de ahí Manzanera empezará a trabajar en lo que parece ser una línea continuista. Resulta complicado hacer hipótesis todavía, pero el primer movimiento indica que no van a ser pocos los jugadores que repitan la próxima campaña.