Sinner, en modo robot, ahoga a Medvedev en poco más de una hora (6-1,6-2) y se encamina hacia su primer título en Miami
Jannik Sinner y Daniil Medvedev se han enfrentado en once ocasiones en el circuito ATP. El ruso se llevó las seis primeras y el italiano las cinco siguientes. Daniil estuvo muy cerca de romper la racha del italiano en la final del Open de Australia, pero la épica remontada del transalpino parece haberle hecho mucho daño al ruso. Hoy apenas se presentó en el Hard Rock de Miami para competir ante el `robot´ Sinner que se limita a no cometer errores.
Dos juegos tardarían el soviético en dejarle el primer set en bandeja a Sinner y con ello el partido, pues sería incapaz de emitir respuesta. Aspavientos, gestos, gritos y muchas palabras con su box que poco podía decirle para tratar de amortiguar el golpe, pasar el vendaval de la mejor manera posible. Poco más de una hora de sufrimiento y pesadilla padeció Medvedev gracias a un benévolo Jannik Sinner que lo derribó por la vía rápida.
Primer set: Un rodillo llamado Jannik Sinner
Los primeros intercambios ya dejaban entrever la enorme paridad entre ambos jugadores que preferían tutearse de revés a revés, sabedores del picante de sus drives. El ruso apretaría el primer juego al servicio del transalpino sin éxito para luego regalarle un break extraño debido a los fallos incomprensibles de Medvedev. Minutos más tarde, Sinner levantó dos bolas de contrabreak para poner el 3-0 en el luminoso y firmar un inicio fulgurante.
Quizás las cuatro victorias consecutivas del italiano sobre el ruso han hecho mella en la cabeza de un Medvedev inseguro, poco resolutivo y muy simplón en su planteamiento. Ser un muro no era suficiente, al menos por el momento, para inquietar a un Jannik en modo robot. Sin brillar en exceso desesperó al ruso a base de limpiar las líneas del fono de pista y no cometer errores apenas, y le volvió a romper el servicio con suspense.
Salvó el rosco el ruso cuando se cumplía media hora de juego, más porque Sinner no quiso desgastarse en peleas innecesarias que por méritos propios. Cometiendo la mitad de los errores no forzados, doce a seis, y más del doble de winners, siete a tres, Jannik cerró un primer set inmaculado en el que siquiera tuvo que meter sexta. Da la sensación de que la final de Australia desequilibró la balanza entre ambos, el italiano le tiene tomada la medida.
Segundo set: Buscando a Daniil
Medvedev es un tipo que no se arruga por muy complicadas que sean las circunstancias, lucha por cada bola independientemente de cuál sea el marcador…pero cuando no tiene el día se desespera rápidamente. Se trata de un jugador que gesticula mucho si las cosas no van bien y hoy, tanto su rostro como su cuerpo, evidenciaba lo incómodo que se encontraba en pista. Contexto que daba alas a Sinner, quién volvía a ponerse 2-0 a las primeras de cambio en esta segunda manga.
Un leve bajón de Sinner le otorgó la oportunidad a Medvedev de reengancharse al encuentro, pero el propio italiano se encargaría de solucionarlo con dos aces. Le puso el caramelo y se lo quitó, Medvedev seguía chocándose una y otra vez contra el muro transalpino. No tuvo respuesta para ello el ruso que se vino abajo por completo al no recuperar la ventaja y cedió su servicio de nuevo, dejando así el choque visto para sentencia.
Hay KOs en boxeo que dejan mucho menos grogui al oponente que los constantes hachazos de Sinner a Medvedev en el día de hoy. Se dejó ir por completo el ruso al que encima ahora se le viene su peor época del año: la tierra batida, donde es habitual verle maldecir contra la superficie torneo tras torneo. En caso de levantar el título el próximo domingo, el italiano adelantará a Alcaraz en el ránking ATP, alcanzando el mejor puesto de su carrera.
