El joven delantero brasileño, futuro jugador del Real Madrid a partir de la próxima temporada, salió en el descanso y revolucionó el partido para lo bueno y para lo malo
El encuentro entre España y Brasil nos ha dejado una promesa que cada vez más, pese a su edad muy corta, tan solo 17 años, se erige como una estrella del fútbol mundial y ese es Endrick. El delantero de Palmeiras, futuro futbolista del Real Madrid a partir de la próxima campaña, salió tras el descanso y en tan solo 45 minutos demostró lo que le puede aportar al equipo blanco y también lo que puede generar en la liga española.
Pese a que era un España – Brasil, en el Estadio Santiago Bernabéu, Endrick no se arrugo y le bastaron tan solo cinco minutos para firmar uno de los goles del encuentro junto al de Dani Olmo. En segunda jugada, después de que Brasil botase un saque de esquina, Endrick, siendo el más listo de la clase, sacaba un remate seco, a media altura, al que nada pudo hacer Unai Simón. El ariete de la Canarinha, pese a estar en su futura casa, no escondió, seguramente enajenado por las emociones que recorrían su cuerpo, sus ganas de celebrar su gol, dejando un abrazo conmovedor junto a su padre, visiblemente emocionado.
Todos nos estamos relamiendo con las contiendas que nos van a brindar Endrick y Lamine Yamal
En tan solo 45 minutos, Endrick fue capaz de demostrar la estrella mundial en la que se puede convertir y a la que apunta maneras. Aparte, el ariete de la Canarinha parece que puede brindarnos una batalla muy seductiva con el otro jugador que ha brillado por encima del resto: Lamine Yamal. Como dos jugadores, con 17 y 16 años, respectivamente, pueden ser los dos mejores futbolistas de un partido entre España y Brasil, que puede ser perfectamente la final de la Copa del Mundo.
La mejor noticia: uno de ellos, Lamine Yamal, ya juega en nuestra Liga, el otro, Endrick, lo hará a partir del próximo mes de agosto. Un nuevo duelo que puede marcar otra época, como la marcaron Messi y Cristiano, está servido.
No todo es positivo en Endrick
Más que el partido, la segunda parte de Endrick, en tan solo 45 minutos, nos ha demostrado lo bueno y lo malo que puede reflejar sobre un terreno de juego en España. En su faceta negativa, Endrick ha dejado varias acciones que no son han sido muy halagüeñas. Sus faltas a destiempo y, especialmente, su entrada a Cucurella no ha gustado nada en la Selección Española. Del mismo modo, esas patadas, muy a destiempo, sean el cisma de su inexperiencia.
El otro aspecto de su registro menos positivo ha sido su actitiud ‘combativa’. Pese a que solo tiene 17 años, Endrick ha dejado muestras de que no es jugador que se vea sobrepasado por la situación e, incluso, le gusta jugar con las hostilidades. En efecto, el delantero centro de Palmeiras ha recordado en algunas acciones a los sucesos que se producen entre las aficiones rivales y Vinícius. Por lo tanto, a partir de la próxima temporada, el foco mediático que ahora mismo se centra en Vinícius puede verse repartido entre el ’20’ del Real Madrid y Endrick porque sí, este diamante bruto pretende no dejar aa nadie indiferente.
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