UB Conquense / Alfonso Fernández
La UB Conquense se distancia del Cazalegas en 4 puntos, más golaverage a favor, a falta de jugarse 9 partidos para el final de la temporada.
Los nervios del final de temporada empiezan a florecer por primavera. Todos los equipos están entrando en un tramo decisivo y clave para terminar de cumplir los objetivos propuestos por directiva, plantilla y afición al inicio del curso. Para el Conquense, todos estos meses de campeonato habían estado repletos de felicidad. Victorias, buen juego, porterías imbatidas y un sentimiento de superioridad importante respecto al resto de rivales por el ascenso. Solo un equipo había logrado aguantar ese ritmo, el Cazalegas, una «inesperada» sorpresa que quiere conseguir la gesta de ascender por segundo año consecutivo.
Ahora, con 9 partidos para el final de temporada, la felicidad sigue presente en Cuenca. Primeros, con una distancia importante, pero no decisiva, frente al Cazalegas y viendo cada vez más cerca el ascenso. Sin embargo, la concentración tiene que ser máxima, puesto que pequeños despistes pueden armar un buen lío, véase el empate frente al Atlético Albacete o la derrota en Puertollano. Dos pinchazos fuera de casa que dejan ver que, si de normal, nadie regala nada en este grupo XVIII de 3ªRFEF, ahora, con las habichuelas en juego, cada partido es un capítulo más de los juegos del hambre, y como visitante aún más duro. Por ello, el Conquense confía y debe hacerse fuerte en su feudo, lugar donde lleva sin conocer la derrota más de un año, La Fuensanta.
Alfonso Fernández / UB Conquense
Un 15 de 15 para casi sellar el ascenso
De esos 27 puntos que quedan en la temporada, 15 se jugarán en La Fuensanta. Una ventaja que tiene que hacer buena la Balompédica para poder pensar en un ascenso cada vez más posible. A Cuenca viajarán cinco equipos donde, sobre el papel, el Conquense es superior (San Clemente, La Solana, Tomelloso, Tarancón y Azuqueca). Estos últimos podrían llegar a esas jornadas sin nada más que la honra en juego. Por ello, aún con prudencia y respeto a los rivales, este 15 de 15 suena a un logro factible, además de esconder un botín muy grande para los intereses de la Balompédica.
Estos encuentros ganan aún mas importancia cuando las visitas del Conquense son, cuanto menos, complicadas. Socuéllamos y Quintanar recibirán al Conquense inmersos de lleno en la pelea por el play-off. Partidos donde puntuar se volverá una plena odisea y la Balompédica tendrá que sudar tinta china para hacerlo. Entre medias de esos partidos, el Conquense deberá viajar a Torrijos. Un conjunto prácticamente descendido, pero que va a intentar agotar sus posibilidades hasta el final. Por último, los blanquinegros sellarán su temporada, al menos en liga, como visitantes en Villarrobledo. Un equipo que parece descolgarse del play-off cada jornada que pasa, pero donde nunca es bueno llegar con los deberes por hacer.
Un pleno que obliga al Cazalegas a no fallar
Si el Conquense fuese capaz de completar el pleno en su feudo, obligaría a su más inmediato perseguidor a, prácticamente, no poder fallar. Y lo cierto es que, mirando los rivales, el Cazalegas no lo va a tener nada fácil para conseguirlo. El conjunto toledano, emulando al Conquense, deberá viajar hasta Quintanar o Villarrobledo y, después, recibir al Villarrubia. Tres citas que, unidas a la presión de no poder fallar, podrían catapultar al Conquense hacia el tan ansiado y esperado ascenso.