En la tarde de ayer, Andrés Iniesta Luján disputó su encuentro número 1000 como futbolista profesional, un hito que sigue agrandando su leyenda
El 11 de mayo de 1984, José Antonio Iniesta y María Luján trajeron al mundo a un niño que emocionaría a un país entero. En Fuentealbilla (Albacete), su querida tierra, el pequeño Andrés comenzaría a dar sus primeros pasos como jugador de fútbol. Hoy, casi 40 años después, tres equipos diferentes y observando su magia por todos los rincones del mundo, los padres de aquel crío ven como su hijo se ha convertido en uno de los más grandes de la historia del deporte rey.
Brunete, su catapulta a La Masía
El mítico torneo de fútbol base impulsado por el periodista José Ramón De La Morena, presenció en la edición de 1996, una de las mayores exhibiciones de la historia del torneo. A pesar de haber quedado eliminado en semifinales, Andrés Iniesta se llevó el reconocimiento de MVP. Superó a Jonathan Valle, que, a priori, parecía el claro favorito, siendo el mejor jugador del Racing de Santander, campeón del torneo y que eliminó al Albacete de Iniesta en las semifinales.
Para la historia quedaron las declaraciones de Radomir Antic «No tenéis ni idea, el ‘5’ va a ser capitán de la selección» refiriéndose al mago de Fuentealbilla. Lo que vendría después, ya lo conocen todos. Pero el trofeo de MVP no fue el suceso más importante para Andrés tras su gran torneo. Los dos equipos más grandes del país se pelearon por su fichaje con tan solo 12 años. Finalmente, en septiembre de ese mismo año terminaría sumándose a las filas del FC Barcelona, ingresando en La Masía.
Su compleja llegada a Barcelona
El propio Andrés ha reconocido en múltiples ocasiones que sus inicios en Can Barça fueron de lo más complicado. Siendo un niño, dejó su acogedora Fuentealbilla para recalar en una gran ciudad como Barcelona, lejos de su familia. Sin embargo, terminó adaptándose y pasó cinco intensos años por las diferentes categorías inferiores del Barça. En la temporada 2000-01, Lorenzo Serra Ferrer, entrenador del primer equipo por aquel entonces, le subió a varios entrenamientos.
Pero su debut no llegaría hasta la 2002-03, a las órdenes de Louis van Gaal. El 29 de octubre de 2002 se estrenó con victoria por 0-1 ante el Brujas en la Champions League. Casi dos meses después, llegó su debut en liga en un cómodo 0-4 ante el RCD Mallorca. Durante esa temporada alternó el primer equipo con el filial blaugrana. En la 2004-05 fue inscrito como jugador de la primera plantilla. A los mandos de Frank Rijkaard, se convirtió en el jugador que más partidos de liga disputó en esa campaña junto a Samuel Eto’o, aunque habitualmente partía desde el banquillo. Aquella Liga fue su primer título como profesional.
2005-2008: La precuela del éxito
Una vez fue inscrito como jugador del primer equipo, su protagonismo comenzó a multiplicarse. En 2006 participó en la final de la Champions League ante el Arsenal. Desde el banquillo saltó al campo para darle la vuelta al marcador y conseguir la segunda ‘Orejona’ del club blaugrana. Apenas 10 días después de ese gran hito, Andrés se estrenó con la Selección Absoluta, debutando en el Mundial de Alemania 2006. Lo que se acabaría convirtiendo en su primera gran temporada.
En el verano de 2007, tras la marcha de Ludovic Giuly, pasó del dorsal ’24’ a su icónico ‘8’. A pesar de que ya estaba asentado en el primer equipo, los resultados no acompañaban al equipo, y el FC Barcelona encadenó dos temporadas sin títulos. Esto le acabaría costando la destitución a Rijkaard, que daría paso al joven e inexperto entrenador del filial blaugrana, Josep Guardiola. La llegada del de Sampedor coincidió con la Eurocopa de Austria 2008, a la que Iniesta llegaría como titular indiscutible.
2008-2012: Gloria a todos los niveles
El verano de 2008 fue el inicio de algo muy grande. Una selección llena de jóvenes talentos como Xavi, Torres, Villa o el propio Iniesta, entre muchos otros, lograrían la segunda Eurocopa para España. Tras vencer a Italia y Rusia en cuartos y semifinales respectivamente, los de Luis Aragonés se llevaron el trofeo ante Alemania en la gran final. El primero de los tres grandes títulos de Iniesta con la absoluta tan solo era el principio de la gran carrera que le esperaba al de Fuentealbilla.
Y es que, en su primera temporada con Guardiola en el cargo, se convirtió en capitán junto a Puyol, Xavi y Valdés. Esto era una muestra simbólica de su importancia en el equipo. Junto a Xavi, comandados por un jovencísimo Sergio Busquets, comenzaron a mostrar las primeras pinceladas del que se acabaría convirtiendo en uno de los mejores centros del campo de la historia del fútbol. La 2008-09 se saldó con seis títulos para el FC Barcelona, siendo, por aquel entonces, el único equipo en conseguirlo, un hito histórico.
Durante esa temporada, Andrés vivió momentos mágicos con la elástica blaugrana. El 2-6 en el Santiago Bernabéu fue uno de los más icónicos, pero sin duda, su gran momento llegó en Stamford Bridge. En la vuelta de las semifinales de la Champions League, el Barça estaba eliminado en el descuento ante el Chelsea. Sin embargo, cuando el partido estaba agonizando, Iniesta se sacó un zapatazo desde la frontal que daba el pase a la final a los catalanes en el 93′.
Tras este curso histórico, las expectativas con Iniesta y el Barça estaban por las nubes, pero las lesiones frustrarían su temporada. A pesar de esto terminaría sumando una nueva Liga y otra Copa a su palmarés. Con todo llegaba el Mundial de Sudáfrica 2010, y Vicente del Bosque le convocó a pesar de su poca continuidad durante la temporada. Después de caer lesionado en el debut ante Suiza, se temía lo peor. Sin embargo, Andrés se recuperó y reapareció marcando en el partido decisivo ante Chile. Las rondas fueron pasando e Iniesta era cada vez más protagonista. Ya en la final, el manchego fue apaleado por los futbolistas neerlandeses. Y tras 116 minutos de sufrimiento, el ‘6’ de la selección elevó a España al Olimpo con el tanto definitivo que le daba a los de Del Bosque la Copa del Mundo.
Como héroe nacional, completó el podio del Balón de Oro de ese mismo año junto a Xavi y Messi, pero Iniesta terminaría segundo por detrás del argentino. En la 2010-11, los de Guardiola se quedaron a punto de lograr otro ‘sextete’ histórico, pero el Real Madrid les arrebató la Copa del Rey. Por lo que Andrés sumaba otra Liga y su tercera Champions a su ya extenso palmarés. El curso siguiente «tan solo» pudo ganar la Copa del Rey, aunque terminaría completando su ‘triplete’ personal con España.
Para cerrar un tramo de cuatro años repletos de títulos, Andrés Iniesta llegaba a la Eurocopa 2012 en plena forma. Tras arrasar con diferentes selecciones, España se plantaba en la final ante Italia, que acabaría siendo goleada por La Roja con un imponente 4-0. Andrés fue elegido como el mejor futbolista del torneo, y más adelante sería reconocido también por la UEFA como el mejor jugador de Europa.
2012-2018: Su final en el Barça
Tras conquistar una nueva Eurocopa, Iniesta vio como pasaron múltiples entrenadores tras la salida de Pep Guardiola. Con Tito Vilanova se llevó la famosa liga de los 100 puntos, que propició la consiguiente Supercopa de España a los mandos del ‘Tata’ Martino. Tras un par de años más discretos, Iniesta y el Barça volverían a lo más alto con la llegada de Luis Enrique al banquillo culé. Con la MSN como principal protagonista, el Barcelona se volvió a quedar a las puertas de obrar su segundo ‘sextete’, tras perder la Supercopa de España ante el Athletic. Aunque sí que lograría su segundo triplete ganando Liga, Copa y Champions.
A pesar de esto, con el asturiano, Iniesta se convirtió en el primer capitán del Barça y sumó otros 9 títulos a su palmarés, entre ellos, su cuarta Champions League. Tras la salida de Luis Enrique y la llegada de Ernesto Valverde, Andrés comenzó a tener un rol menos protagonista, aunque todavía daba muchos minutos de calidad. Con el ‘Txingurri’ ganaría 3 títulos más, cerrando su etapa en el Barcelona con una auténtica exhibición ante el Sevilla en la final de la Copa del Rey. Tras 22 años en el club, Andrés Iniesta Luján dejaba el FC Barcelona con 32 títulos en su palmarés. Apenas un mes después, dejaría la Selección tras la tragedia del Mundial de Rusia con 131 internacionalidades, en las que logró 2 Eurocopas y una Copa del Mundo.
Un retiro por todo lo alto
Tras una de las despedidas más emotivas que se recuerdan en Can Barça, Iniesta se unió a las filas del Vissel Kobe japonés, donde disputó seis temporadas. El pasado verano cambió Japón por los Emiratos Árabes. Desde su salida de Barcelona, a pesar de haber frecuentado equipos de un nivel inferior en ligas menos competitivas, ha estado en la lista de los jugadores mejor pagados del mundo del último lustro.
El pasado 1 de marzo de 2024, casi 22 años después de su debut como profesional y vistiendo la camiseta del Emirates Club, Andrés Iniesta disputó su partido número 1000. Algunas fuentes afirman que ya había superado esa cifra hace unos meses, pero el propio Andrés anunció el logro a través de sus redes sociales. Este ha sido el último hito del que fue, es y será para siempre uno de los futbolistas más grandes de la historia.
